Mauro Icardi, mediante sus abogadas Elba Marcovecchio y Lara Piro, ha presentado ante la Justicia un pedido urgente en la causa familiar que se está tramitando en Argentina. En este, solicita la posibilidad de ver a sus dos hijas en común con Wanda Nara antes de su regreso permanente a Turquía. Este pedido es adicional a la restitución internacional solicitada hace pocos días.
En el documento, las abogadas señalaron: “Posterior a la evaluación médica que tuvo que realizarse mi representado en Uruguay, necesaria para su rehabilitación, deberá regresar a su club Galatasaray para comenzar los entrenamientos a principios de julio. Allí evaluará si se encuentra en condiciones físicas para trabajar en la pretemporada y cumplir sus funciones laborales durante la temporada de Liga que inicia la primera semana de agosto”. Añadieron que “la fecha exacta de su regreso aún no está establecida, pero está claro que debe ser en los primeros días de julio”.
En lo que respecta al contexto familiar, indicaron que “el padre se ha quedado en Argentina para llevar a cabo su rehabilitación por una lesión, buscando lograr una anhelada y cada vez más distante unión familiar, haciendo esfuerzos por estar cerca de sus hijas y asegurando que su regreso a su hogar en Estambul sea pacífico”. Afirmaron que “el obstáculo al vínculo paterno-filial impuesto por la madre, en clara complicidad con su representación legal actual, ha sido continuo y similar a medidas de facto, que han sido denunciadas en reiteradas ocasiones sin resultados concretos, además de los desplantes públicos en medios masivos en los cuales la madre afirmó que incumpliría cualquier orden de un juez o incluso del presidente de la Nación que la obligara a ‘entregar’ a sus hijas”.
Las abogadas afirmaron: “Más allá de la cosificación de las niñas y del evidente discurso de odio que se repite a diario como un mantra, la madre también ha impedido las videollamadas supervisadas por el M.P.T.”. Incluyeron extractos del informe de la Licenciada Mattera, representante del Ministerio Público Tutelar: “Desde el 26 de abril, fecha en que las niñas estuvieron con su padre, solo se ha logrado concretar una única videollamada paternofilial, el 19 de mayo. Lo más preocupante es que este equipo profesional también se ha visto impedido de comunicarse con las niñas, debiendo recurrir a medidas extremas, como realizarlo a través de la institución escolar en dos ocasiones (7 de mayo y 6 de junio)”.
El informe continúa: “La Sra. Nara, así como su letrado, el Dr. Payarola, siempre han manifestado que lo hacen para proteger a las niñas y preservar su salud psicofísica, hasta que se inicien los tratamientos terapéuticos correspondientes, pero silenciarlas no es protegerlas. El impedimento a comunicarse directamente con los profesionales del Ministerio Público Tutelar constituye una grave vulneración al ‘derecho a ser oído’, de acuerdo a todas las normativas vigentes (CIDN-art.12, Ley 26.061-art.24, CCyCN.art.707)”.
El informe recomendó: “Finalmente, se solicita a su señoría que se instrumente de manera inmediata un régimen de comunicación paternofilial, que garantice las condiciones de protección, resguardo e intimidad referidas por las niñas y comunicadas oportunamente. Además, las videollamadas supervisadas deberían realizarse a través del celular de Francesca o de la persona que se encargue de cuidar a las niñas, para evitar interrupciones cuando su madre no esté en casa”.
Lejos de dar por terminado el escrito, que consta de 8 hojas, las abogadas añadieron: “Lo que afirmamos no es una especulación: durante 2022 y 2023, la madre ha estado con sus hijas 122 días y 456 días sin su presencia (como muestra el cuadro incluido en la demanda de restitución internacional), mientras que el padre se mantuvo junto a ellas durante los dos años previos a la sustracción. No se busca premiar al padre ni reprochar el rol materno, solo se ilustra la verdad material subyacente al vínculo paterno-filial y este divorcio que la Sra. Nara impone entre las niñas y su padre”.
Respecto al inminente viaje, agregaron: “El Sr. Icardi deberá viajar pronto. Por derecho, como ha hecho en todo momento, solicitó la restitución internacional; no hay posibilidad, su señoría, de que el Sr. Icardi se lleve a las niñas por la fuerza, a diferencia de lo que la Sra. Nara hizo al traerlas a Argentina. El Sr. Icardi ha cumplido con cada reintegro en tiempo y forma, además de obedecer cada orden judicial, incluso cuando se le prohibió llevarse a sus hijas del colegio el pasado 5 de junio de 2025, a pesar de que no había restricción alguna para hacerlo y sus hijas deseaban irse con él”.
En su solicitud, concluyeron: “No habiendo riesgo cierto alguno ni conducta previa de mi representado que refuercen el mitómano temor mencionado por la madre y su representación legal, que tanto perjudica a las niñas, solicito a su señoría que se disponga que las niñas estén con su padre hasta su viaje a Turquía”.
Con el objetivo de respaldar este pedido, enumeraron: “Las niñas están de vacaciones y no tienen obligaciones escolares, pero si las tuvieran, mi representado se encargaría de ellas”. Añadieron: “También se comunica que la casa de mi mandante está lista para recibir a sus mascotas. Las habitaciones individuales de las niñas ya están preparadas. Además, se garantiza que podrán realizar videollamadas supervisadas por la Lic. Mattera para mantener contacto con su madre durante su estadía con su padre, y se solicita que en los días que estén con el padre, puedan compartir con su familia ensamblada, a fin de restablecer el vínculo sano que tenían antes de la inoculación de odio que han recibido diariamente desde el 6 de enero hasta hoy”.
Respecto al tratamiento psicológico, se adjuntó el comprobante: “Desde el 25 de marzo de 2025, el Sr. Mauro Icardi está llevando a cabo un tratamiento terapéutico semanal mediante la aplicación Zoom. En este espacio se abordan sus vínculos y la conflictividad con su exesposa, madre de sus hijas Francesca e Isabella. Su participación es muy colaborativa y está preocupada por el bienestar de sus hijas, mostrando una evolución favorable”, afirmó el profesional a cargo, Dott. Guido Bresolin.
En el petitorio final, Icardi solicitó: “a) Se dé por anunciada la fecha aproximada de viaje; b) Se establezca un régimen comunicacional provisional y urgente ante la inminencia del viaje, con carácter cautelar; c) Se reconozca el tratamiento terapéutico que realiza mi mandante”.
