Durante la conferencia de prensa previa al Gran Premio de Bélgica, Franco Colapinto fue consultado sobre la remodelación del Autódromo Óscar y Juan Gálvez de Buenos Aires y el anuncio oficial del regreso del MotoGP a la ciudad a partir de 2027. El piloto argentino celebró este avance para el automovilismo nacional, aunque se mostró cauto respecto a una posible vuelta de la Fórmula 1 al país.
“Me parece genial que MotoGP compita en Buenos Aires, donde hay tantos fanáticos. Llevar de vuelta a la Fórmula 1 será más complicado, pero sería fantástico si se pudiera lograr. Es uno de mis sueños”, expresó Colapinto ante los medios.
En su análisis, destacó que el proyecto actual parece estar enfocado principalmente en adaptar el trazado a los estándares de la Federación Internacional de Motociclismo (FIM), más que a los de la FIA. “Las obras parecen dirigidas más hacia las motos que hacia los monoplazas, y aún queda mucho trabajo por hacer para adecuar el circuito a los requisitos de la F1”, agregó.
Los trabajos en el autódromo forman parte de un ambicioso plan impulsado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires junto al sector privado. La primera fase del rediseño, a cargo del ingeniero Hermann Tilke, busca obtener la homologación FIM para MotoGP, pero también contempla una base común del 90% con la futura configuración para Fórmula 1.
Se eliminarán sectores emblemáticos como la chicana de Ascari y el Curvón Salotto, en función de las nuevas exigencias de seguridad.
Para alcanzar esa meta, se requerirá una segunda fase de obras que eleve la homologación del circuito al Grado 1 de la FIA, con una inversión total que podría aproximarse a 1.000 millones de dólares.





