A pesar de que el mercado de pases se encuentra cerrado, en las últimas horas se produjo un acercamiento de Boca Juniors hacia Estudiantes de La Plata por el posible fichaje de un jugador. El futbolista en cuestión es Santiago Ascacibar: Juan Román Riquelme se comunicó con Juan Sebastián Verón y le presentó una oferta formal por su pase, que incluía a Marcos Rojo, quien atraviesa un conflicto con el Xeneize.
Según lo informado por ESPN, Riquelme se puso en contacto con el presidente del Pincha para ofrecer condiciones por el mediocampista de 28 años, vital en el esquema de Eduardo Domínguez. Después de haber sumado a Leandro Paredes, el presidente xeneize considera que necesita una alternativa en esa posición del campo, y Miguel Ángel Russo dio el visto bueno para avanzar en su búsqueda.
Cuando se le consultó al entrenador de Boca hace algunas horas sobre la posibilidad de incorporar a algún refuerzo más, deslizó: “Si podemos aportar algo más a lo que ya tenemos, mejor, pero no es tan sencillo. Ponerse la camiseta de Boca es completamente diferente a todo”.
Lo concreto es que, según los detalles revelados, Estudiantes rechazó la oferta de 2.5 millones de dólares y el pase de Rojo por el volante, que ya había sido mencionado en varias ocasiones para sumarse a la Ribera. La clave del contacto fue Kristian Bereit, representante de Rojo desde hace tiempo y también del Ruso Ascacibar, quien recientemente manifestó que había recibido el llamado de Fernando Gago para unirse a Boca.
“Sí, había hablado en diciembre (con Gago). Él quería sumarme, pero son temas que fueron pasando”, confesó Ascacibar en una entrevista televisiva. Además, mencionó que también existió un interés de River: “Son los clubes más importantes de Argentina, que te ponen en el radar de todo en Europa y aquí, pero Estudiantes me brindó todo y yo puedo ofrecerle el 100%. Mi cabeza sigue aquí. Quiero darle lo mejor al club porque sé que puedo aportar más, y eso intento demostrar día a día. Estoy lleno de ganas y deseos”.
Ascacibar tiene un contrato vigente hasta diciembre de 2027 con el León, que se apresta a iniciar los octavos de final de la Copa Libertadores ante Cerro Porteño (la ida está programada para el miércoles 13 de agosto en Asunción). Sin duda, este compromiso es uno de los motivos por los que el club platense se aferra a una de sus figuras, que también ha sido mencionado como posible convocado por Lionel Scaloni para la selección argentina en el último tiempo.
La situación de Rojo, en cambio, es muy diferente. El defensor de 35 años está en conflicto con Boca desde hace tiempo y su ciclo en la entidad azul y oro parece agotado. Consciente de que no cuenta con la consideración de Russo frente a Ayrton Costa y Marco Pellegrino, aún le restan cinco meses de contrato, y por ahora tiene la intención de cumplirlo. Durante el Mundial de Clubes, el entrenador xeneize mantuvo una charla con el ex Manchester United, en la cual le sugirió que buscara nuevos horizontes.
De regreso en Buenos Aires, Russo optó por no convocarlo para ninguno de los partidos de los certámenes domésticos, y en la última semana, Rojo fue incluido en una lista de jugadores alejados junto a Cristian Lema y Marcelo Saracchi. “Fue una cuestión disciplinaria”, afirmaron desde la institución. Esta decisión fue tomada por la comisión directiva, según confirmó Russo en su más reciente aparición pública.