Malik Beasley, quien recientemente formó parte de los Detroit Pistons en la temporada de la NBA, fue desalojado de su apartamento en el centro de la ciudad a raíz de una orden emitida por el Tribunal del Distrito 36. El histórico edificio donde residía es propiedad de Bedrock Detroit, la compañía inmobiliaria perteneciente a Dan Gilbert, propietario de los Cleveland Cavaliers.
El proceso de desalojo, que incluye dos demandas por un total de 21.500 dólares, está bajo la supervisión de la jueza Andrea Bradley-Baskin, quien se encuentra bajo una investigación del FBI por soborno y fraude. La sentencia se dictó en rebeldía debido a que Beasley no presentó respuesta a la segunda demanda, de acuerdo con los registros judiciales.
La situación financiera y personal del exbase de 28 años se ha complicado tras la retirada de una oferta de tres años y 42 millones de dólares por parte de los Pistons, que se produjo después de que el FBI iniciara una investigación relacionada con apuestas. A pesar de que Beasley tuvo un desempeño notable en la temporada 2024-25 con Detroit, estos problemas ponen en riesgo su futuro profesional.
Curiosamente, a lo largo de su carrera en la liga de baloncesto más competitiva del mundo, ha acumulado aproximadamente 60 millones de dólares solo en salarios. No obstante, enfrenta varios problemas judiciales.
A la investigación federal se suman las dificultades económicas de Beasley, quien enfrenta una serie de demandas por deudas que totalizan 8 millones de dólares.
Uno de los principales reclamos proviene de Hazan Sports Management Group, su antigua agencia de representación con sede en Nueva York. Esta firma interpuso una demanda en un tribunal federal de Nueva York, solicitando un pago de 2.25 millones de dólares. La deuda se origina en un adelanto de 650.000 dólares que Beasley recibió en función de futuros ingresos por uso de su imagen.
El historial de deudas de Beasley también incluye una sentencia previa de 5.8 millones de dólares a favor de South River Capital, una empresa especializada en préstamos a deportistas profesionales. Esta decisión, emitida en Maryland hace más de tres años, agrava aún más su situación financiera.
Las demandas que enfrenta no se limitan a grandes entidades corporativas. La barbería Cairo Cuts, situada en Milwaukee y reconocida por atender a diversas estrellas de la NBA, ganó una demanda contra el base por 26.827 dólares. Poco después, el dentista Hassan Alshehabi, de la clínica Delicate Smiles en Minnesota, recibió otra sentencia favorable por 34.390 dólares. Debido al incumplimiento de pago, el dentista procedió a embargar los cheques de salario de Beasley en los Pistons.
A pesar de sus inconvenientes extradeportivos, ha mantenido un rendimiento destacado en la cancha. La temporada pasada, firmó con los Pistons un contrato de un año por 6 millones de dólares, consolidándose como una pieza clave del equipo, con un promedio de 16 puntos por partido. Su actuación le valió terminar en la segunda posición en la votación al Sexto Hombre del Año.
En sus nueve temporadas en la NBA, Beasley también ha integrado equipos como Denver Nuggets, Utah Jazz, Minnesota Timberwolves, Milwaukee Bucks y Los Angeles Lakers.
A través de sus redes sociales, expresó sentirse traicionado y juzgado por la opinión pública. Reconoció haber cometido errores, aunque sostuvo que mantiene una actitud positiva y reservada. Asimismo, subrayó su determinación competitiva: “Estoy listo para destrozar a cualquiera que se me ponga por delante”.
