El vocero del Grupo Socialista en el Congreso, Patxi López, advirtió este martes que la participación de España en el Mundial de Fútbol 2026 podría verse amenazada si el combinado israelí se clasifica. “Lo valoraremos en su momento”, indicó, dejando abierta la posibilidad de un eventual boicot que marcaría un hito en el deporte nacional.
Las declaraciones de López se dan poco después de que RTVE confirmara que España no participará en Eurovisión 2026 si finalmente Israel compite en el certamen. La postura del Gobierno y del PSOE indica un endurecimiento de la presión diplomática y cultural hacia el Gobierno de Benjamín Netanyahu, en respuesta a la ofensiva militar en Gaza, calificada por varios portavoces del PSOE como un “genocidio”.
La posible retirada de España del Mundial 2026 tendría consecuencias significativas. Nunca antes la selección nacional había decidido no participar en una Copa del Mundo por razones políticas o diplomáticas. Sería un precedente comparable solo a los boicots olímpicos de los años 80 durante la Guerra Fría.
En una conferencia de prensa en el Congreso, López recordó que la comunidad internacional ya impuso un castigo similar a Rusia tras la invasión a Ucrania en 2022, excluyendo a equipos y deportistas rusos de competiciones internacionales. “Es lo que estamos demandando actualmente, pedir esa exclusión general. Luego ya valoraremos nuestra posición si se da un escenario de clasificación”, explicó.
El vocero socialista enfatizó que el objetivo es enviar un mensaje claro: que la sociedad israelí entienda que el mundo no es indiferente ante la violencia en Gaza. “Lo que buscamos es que si los equipos israelíes no pueden participar en eventos deportivos o en Eurovisión, algunos empiecen a abrir los ojos. Porque los nuestros claramente están abiertos y no toleran lo que ven”, declaró.

Actualmente, Israel se encuentra en la tercera posición de su grupo de clasificación para el Mundial, con pocas posibilidades de lograr una plaza directa. No obstante, podría intentar una repesca, lo que mantiene abierta la opción de su participación en el torneo que se llevará a cabo en México, Estados Unidos y Canadá.
En la misma línea, se pronunció la portavoz del Gobierno y ministra de Deportes, Pilar Alegría. “El deporte no puede ser ni debe ser una isla independiente de lo que ocurre en el mundo real, especialmente cuando ese mundo real nos habla de la violación de los derechos humanos”, enfatizó con firmeza.
Alegría reafirmó que la postura de España será coherente con lo que se adoptó con Rusia. “Si en ese momento se justificó un veto, ahora la comunidad internacional no puede hacerse la desentendida”, sostuvo.
El clima de protesta social ha respaldado esta postura política. El pasado domingo, la última etapa de La Vuelta ciclista en Madrid fue interrumpida por manifestantes propalestinos que criticaban la presencia de un equipo financiado por un empresario relacionado con el Gobierno de Netanyahu. López defendió estas acciones como una muestra de la “dignidad de un pueblo que no desea ser cómplice”.
“Ver a bebés y niños asesinados, personas tiroteadas al ir a buscar alimentos, ciudades devastadas… eso no es defensa, eso es genocidio,” afirmó con contundencia el vocero socialista. Según él, el silencio internacional equivaldría a complicidad, por lo que es necesario trasladar la presión también al ámbito deportivo.






