Marcos Llorente, conocido principalmente por su trayectoria como futbolista de élite, también se convierte en una figura que atrae la atención fuera de las canchas debido a sus singulares hábitos y opiniones que comparte abiertamente, tanto en su vida cotidiana como en redes sociales. El mediocampista madrileño del Atlético de Madrid no solo genera titulares por su rendimiento en el campo, sino también por posicionamientos que lo distinguen y que, en ocasiones, generan controversia.
Entre las prácticas que ha admitido adoptar y defender se destaca la dieta paleolítica, un régimen alimenticio basado en supuestos principios de la alimentación de los primeros humanos. Además, ha reconocido públicamente su preferencia por tomar el sol sin protección solar, una opción que argumenta como beneficiosa a pesar de las recomendaciones de salud. También ha comentado que, en ocasiones, sale a la calle sin camiseta con temperaturas bajo cero, actitud que asocia con una mejor adaptación física y mental. Otro episodio que generó comentarios fue su reacción y reflexiones sobre el apagón masivo que sufrió España hace unos meses, donde, a través de sus redes, expresó sus propias interpretaciones y dudas acerca de las causas y repercusiones de aquel suceso.
Recientemente, Marcos Llorente ha vuelto a ser el centro de atención tras manifestar su creencia en la teoría de los chemtrails, que sostiene que las estelas que se ven en el cielo después de que pasan los aviones no son simplemente producto de la condensación del vapor de agua, sino residuos químicos dispersados por razones ocultas relacionadas con la manipulación climática o la geoingeniería. Tanto él como su pareja, Paddy Noarbe, han dejado constancia en sus redes sociales de su apoyo a estas ideas, afirmando que se trata de “geoingeniería”, que ellos definen como “un conjunto de técnicas destinadas a intervenir y modificar el clima a nivel global”. En sus publicaciones han argumentado que “las estelas que dejan los aviones no son rastros de vapor de agua y que son sustancias químicas liberadas para manipular el clima”.

La postura de Llorente volvió a tener relevancia recientemente en un contexto futbolístico, gracias a la interacción digital entre diversos jugadores tras una publicación hecha por Luis Milla, mediocampista del Getafe, y el perfil del club azulón. En dicha publicación, acompañada de varias imágenes después de un partido contra el Oviedo, se puede ver a los futbolistas celebrando un gol. En la segunda imagen aparece en el cielo una clara estela de avión. Aprovechando ese detalle, Marcos Llorente comentó de manera breve pero contundente: “Fumigada en la 2”, haciendo referencia directa a la estela que se aprecia en la segunda imagen, reiterando así su creencia en la existencia de operaciones de fumigación aérea.
La respuesta de Luis Milla no se hizo esperar y optó por contestar con carcajadas, lo que aportó un toque de humor a la conversación, interpretado por muchos como una manera de relajarse ante un tema que genera debate y escepticismo, tanto entre los futbolistas como entre los aficionados que siguieron el intercambio en redes. Este episodio se inserta dentro del perfil público de Llorente, que no evita hacer públicas sus convicciones sobre bienestar, salud o fenómenos ambientales. Sus opiniones sobre la dieta, la exposición al frío o al sol, y su interpretación de fenómenos meteorológicos o sociales, como en el caso de las estelas de los aviones, han cambiado la percepción de muchos respecto a su figura.






