La situación es delicada, eso está claro. Por un lado, está la salud de Miguel Russo, la prioridad absoluta en este momento. Por el otro, el futuro de un equipo, el de su equipo, que al menos en Varela no supo manejar de la mejor manera su primera ausencia en un partido. Y en medio de todo esto se encuentra Claudio Úbeda, quien dirigió a Boca ante Defensa, dejando más preocupaciones que esperanzas. Por eso, al inicio de la semana, la incertidumbre reina en el Xeneize, una vez más con el DT ausente y su principal colaborador al frente de la práctica.
En Boca, en estas horas, se han extremado los cuidados al hablar sobre la situación de Miguel y su posible regreso a los entrenamientos (o a dirigir los partidos). Y en cierta medida, esto se debe a que no hay certezas, a pesar de que dentro del club mantienen la calma y continúan priorizando la salud del entrenador, que es lo más importante.
Por ello, la práctica de este martes tuvo nuevamente a Sifón al mando, y aunque faltan varios días para el partido ante Newell’s, todo indica que volverá a dirigir a Boca este domingo, y por primera vez en la Bombonera.
Todo indica que el ayudante dirigirá también ante Newell’s.Sin embargo, la incertidumbre sobre el futuro del cuerpo técnico de Miguel comienza a intensificarse, más allá de que hoy cuenta con el apoyo de Juan Román Riquelme, algo que siempre han manifestado en el club. Está claro que Boca necesita clasificarse a los playoffs y, fundamentalmente, a la Copa Libertadores del año que viene. Así, a todas luces, el próximo partido será toda una prueba de cara al futuro.
Lo que sigue igual
De todos modos, mientras tanto, la planificación en relación con las semanas anteriores no se alterará por ahora. Aunque se cambió el horario del reencuentro del plantel (generalmente la semana comienza por la tarde, pero este martes la práctica fue por la mañana), el resto de la agenda mantiene las costumbres establecidas antes del empate con Racing a mediados de agosto.
Este miércoles, entonces, se llevará a cabo el doble turno habitual, mientras que el jueves será nuevamente el día del fútbol en la Bombonera. Tanto el viernes como el sábado habrá entrenamientos por la mañana para dejar concentrados a los convocados, con miras al partido del domingo por la tarde (19 horas) ante la Lepra.
El equipo mantiene su agenda.El día a día, entonces, dará señales de cómo avanza la situación en torno a Russo y, por supuesto, también de cómo trabajará el equipo en la búsqueda de un once para intentar volver al triunfo tras tres encuentros sin lograrlo.
En este marco, el traspié ante Defensa no fue un resultado cualquiera, ya que sacó a Boca de la zona de Libertadores en la Anual y puso, como nunca antes, el foco crítico en el cuerpo técnico de Russo, debido a la falta de respuestas desde el banco, los cambios polémicos y una derrota que tuvo un impacto negativo, no solo por el marcador, sino también por cómo se dio: en el descuento y tras el 1-1 parcial logrado también en la agonía.
