Hace casi dos años, Diego Herazo se unió a San Lorenzo como refuerzo, pero no tuvo muchas oportunidades y pasó más tiempo a préstamo que en el club. Sin embargo, en el último encuentro, volvió a ingresar y le bastaron pocos minutos al colombiano para marcar el descuento. “Dimos todo y no se nos pudo dar”, lamentó tras el 2-1 en La Fortaleza.
El atacante de 29 años llegó a Boedo en febrero del año pasado, pero en julio fue cedido a Nacional de Uruguay, donde disputó 32 partidos y anotó diez goles. Ahora, regresó a mitad de año y ante Lanús sumó minutos por cuarta vez.
“Nos tocó jugar ante un buen rival, un equipo que juega bien y más en su estadio”, destacó el cafetero, quien entró con buen pie y logró convertir nuevamente tras un largo tiempo con la camiseta azulgrana. “Más que una revancha, es una oportunidad estar en un equipo grande; quiero demostrar que puedo estar acá”, afirmó.
Vale recordar que su anterior gol (solo tiene dos en el Ciclón) había sido en febrero de 2024, en el 2-0 ante Tigre, pero la derrota le impidió disfrutar completamente de la alegría: “Nos vamos con bronca porque el equipo luchó y desde el primer minuto buscamos el resultado”.