A 21 años de la histórica medalla de oro obtenida en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, la actividad de la Generación Dorada llegó a su fin. Carlos Delfino, el único jugador de aquel equipo dirigido por Rubén Magnano que seguía en actividad, anunció su retiro del básquet profesional, cerrando así el capítulo de uno de los planteles más exitosos en la historia del deporte argentino.
El Lancha, quien hasta la temporada pasada jugaba en el Benedetto XIV Cento de la Serie A2 de Italia, comunicó que su carrera de 27 años como profesional ha llegado a su conclusión. En diálogo con Doble Doble, y con Julio Lamas presente, el base de 43 años expresó: “Ando muy bien, muy contento. Ya no juego más. No empecé la temporada, no me estoy entrenando ni corriendo, y eso ya es bastante. Estoy viendo mucho básquet y hay momentos que lo extraño, pero me siento bien físicamente y eso no tiene precio. Jugar no juego más”.
Respecto a los motivos detrás de su decisión, el ex NBA comentó: “Hace algunos meses llegué a un punto que pensé que nunca iba a alcanzar, que era poner excusas para ir a entrenar y no tener ganas de hacerlo. Fue una mezcla de cosas y decidí que ‘llegó el momento’. La verdad me siento muy bien, porque he sufrido muchas lesiones y muchos problemas físicos; llegué a estar inactivo casi cuatro años. Esta vez dije ‘estoy bien, estoy entero y puedo decidir yo’. Siento que ya es suficiente y me puedo ir tranquilo”.
Minutos después de este anuncio, el ex jugador de Boca y de Unión de Santa Fe también compartió su deseo para el futuro y confesó: “Estoy considerando la posibilidad de ser entrenador”.
La carrera de Delfino
El base comenzó su trayectoria en el básquet profesional con Libertad de Sunchales, equipo en el que disputó algunos partidos de la Liga Nacional. Tras este breve paso por el club santafesino, el perimetral se unió a su querido Unión de Santa Fe. Gracias a su destacado rendimiento a los 17 años, el Lancha logró dar el salto al básquet europeo, incorporándose al Viola Reggio Calabria de Italia.
Después de cuatro años en la liga italiana, donde también formó parte del Fortitudo Bologna, el argentino fue seleccionado por los Detroit Pistons en la 25° posición del draft de la NBA. Durante este periodo, su carrera experimentó un importante impulso: tuvo su tan esperado debut con la Selección Argentina -en el Sudamericano de Campos de Brasil- y se mantuvo durante nueve años mostrando todo su talento en la liga más relevante del mundo, jugando para Toronto Raptors, Milwaukee Bucks y Houston Rockets, equipo con el que tuvo su mejor temporada en 2012/2013.
Sin embargo, en ese notable año con el equipo de Texas, el escolta sufrió una grave lesión que lo mantuvo alejado de las canchas durante más de tres años. En un partido de playoffs contra los Oklahoma City Thunder, Delfino se fracturó el escafoides del pie derecho, lo que requirió siete intervenciones quirúrgicas y lo alejó del deporte durante 47 meses.
Después de una prolongada recuperación, el jugador, que ya contaba con la medalla de oro obtenida en los Juegos Olímpicos de 2004 y el bronce de los JJ.OO. de 2008 con la Selección Argentina, regresó a la Liga Nacional para jugar con la camiseta de Boca, donde disputó algunos partidos. En 2017, el Lancha regresó a Europa, firmando con el Saski Baskonia, y luego se trasladó a Italia, donde pasó los últimos años de su carrera.
En Italia, jugó en el Fiat Torino de la Serie A (entre 2018 y 2019), en el Fortitudo Bologna de la Serie A2 (entre 2019 y 2020), en el Victoria Libertas Pesaro (también en 2020), y en el Benedetto XIV Cento de la Serie A2, donde finalmente decidió cerrar su carrera en 2025.