La sospecha de que Atenas de Río Cuarto optó por perder deliberadamente ante Juventud de San Luis en el partido disputado en 2024 con el fin de obtener ganancias a través de apuestas ya ha llevado a 15 imputaciones por parte de la Justicia. El fiscal de cibercrimen de Córdoba, Franco Pilnik, explicó los motivos en declaraciones a medios locales: “Existieron fundamentos sólidos, conforme indica el Código Procesal Penal, para citar a estas personas en calidad de imputados con el objetivo de investigar un hecho de fraude relacionado con un encuentro deportivo que se perdió el 29 de septiembre de 2024″.
El principal acusado es Luis Felippa, quien ocupaba el cargo de presidente del club en el momento del partido. Según La Voz del Interior, los demás implicados tienen o tuvieron vínculos con el club: el exvicepresidente Mariano Lima, Sergio Bustos (secretario), Franco Panzolato (tesorero), Camila Ana Basualdo Quevedo, Fermín Felippa (hijo del expresidente), Claudio Rafael Ochoa y Sergio Emanuel Bustos. La acusación se los considera presuntos coautores del delito de estafa.
También han sido imputados Juan Bazid (quien era el director técnico) y los entonces jugadores Axel Fernando Juárez, Uros Milenkivic, Uirá de Oliveira Marques; así como Abril Peralta (pareja de Bustos), y los individuos Juan Manuel Vilchez y Nicolás Gauna.
La acusación formal
– Creación de nuevas cuentas en los días previos al partido (al menos siete desde Río Cuarto).
– Apuestas combinadas específicas: derrota de Atenas por 3-0, goles en contra tempranos, tarjetas amarillas determinadas.
– Coordinación a través de mensajes y llamadas en dispositivos incautados, revelando que “fueron a menos” intencionalmente (pasividad en defensa, errores deliberados).
– Intento de estafa a la Lotería al generar premios no pagados (bloqueados por sospechas).
¿Cómo fue el partido?
El equipo cordobés necesitaba alcanzar la revalida para poder incorporarse a la Primera Nacional. Sin embargo, el secretario, Sergio Bustos; el tesorero, Franco Panzolato, y la kinesióloga Camila Basualdo Bustos compartieron la misma percepción y apostaron a que el equipo perdería por ese resultado.
La misma apuesta se realizó en una computadora en el hogar de Federico Felippa, razón por la cual el dirigente fue demorado en una comisaría cercana. Posteriormente, se supo que su hijo también había apostado en contra del club y fue uno de los beneficiarios de los cuatro millones de pesos que se pagaron por ese partido.
Tras la denuncia, se llevaron a cabo allanamientos que resultaron en la incautación de teléfonos celulares y otros dispositivos electrónicos, así como documentación relevante para la investigación.
Resultaba curioso que los apostadores cercanos a Atenas apostaran por una derrota, que algunas de sus combinaciones incluyeran goles antes de los 30 minutos o un resultado igual al final. Todo parecía demasiado casual…
Fue precisamente el partido debut de Bazid como entrenador. A los 16 minutos, el defensor brasileño Uirá Marques cometió un autogol. A los 30 minutos, ese mismo jugador tocó la pelota con la mano dentro del área, pero el árbitro no lo sancionó. Sin embargo, un mal rechazo de otro defensor permitió que un delantero rival anotara: 2 a 0. A los cinco minutos del segundo tiempo, nuevamente Marques cometió otra pifia que culminó en el 3 a 0, a pesar de que la planilla oficial dio el gol a un jugador de Juventud Unida que ni siquiera tocó el balón.
Además, se registró un volumen de apuestas por encima del promedio para ese equipo o esa categoría, la tercera del fútbol argentino. Al investigar quiénes eran los apostadores, se descubrió que todos eran vecinos de Río Cuarto.
Federico Felippa, entonces presidente de Atenas de Río Cuarto, junto a Claudio Tapia.Mirá un gol de ese partido
Atenas (Córdoba) –
Un gol del partido sospechado de arreglo
Atenas de Río Cuarto perdió 3 a 0 ante Juventud Unida de San Luis y se acusa a la dirigencia del equipo cordobés de apostar a la derrota de su club.
