La Asamblea de Representantes de Huracán confirmó la expulsión del expresidente del club, Alejandro Nadur, como socio. La apelación presentada por el empresario fue considerada, y la decisión de mantenerlo fuera de los registros de la institución se aprobó con 39 votos a favor y 12 en contra.
Esta medida ratifica la sanción impuesta por el Tribunal de Honor del Quemero. Según el Estatuto, Nadur no podrá acceder a ninguna de las instalaciones del club durante cinco años. Una vez cumplido este período, podrá solicitar su reincorporación bajo ciertas condiciones.
El proceso de expulsión
Nadur se desempeñó como presidente de Huracán desde 2011 hasta 2021, cuando perdió las elecciones frente a David Garzón. En 2025, fue expulsado como socio por la dirigencia encabezada por Abel Poza. La razón principal de su expulsión fue el incumplimiento de una pena de suspensión previa, en vigor hasta el 18 de octubre de 2025, al asistir a un partido en el estadio Tomás Adolfo Ducó contra Defensa y Justicia el 19 de abril de 2025.
¿Por qué estaba suspendido Nadur? La primera sanción fue impuesta por el Tribunal de Honor del club debido a irregularidades en la transferencia de Wanchope Ábila a Boca Juniors en septiembre de 2019. Fue acusado de gestionar la venta sin la aprobación de la Comisión Directiva.
En abril de 2022, el Tribunal de Honor extendió la sanción a cuatro años de suspensión (hasta octubre de 2025) debido a un mal desempeño durante su presidencia. Se alegó un indebido compromiso patrimonial: Nadur habría firmado tres convenios unilateralmente que obligaban económicamente al club, invocando indebidamente su representación institucional.
Además, se argumentó que estos acuerdos no se registraron en las actas de la Comisión Directiva ni se notificaron a la Comisión Fiscalizadora ni al auditor externo, lo que se interpretó como un intento de eludir controles internos. Inclusive, incluían el pago de comisiones a representantes de jugadores sin aprobación conjunta.
Posteriormente, Nadur denunció penalmente a las actuales autoridades del club por utilizar lo que él considera pruebas ilícitas en su contra para expulsarlo como socio.
Nadur argumentó que se hicieron uso de pruebas obtenidas de manera irregular a través de las cámaras de videovigilancia destinadas a garantizar la seguridad durante los eventos deportivos, ordenadas por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Asegura que estas imágenes fueron empleadas para perseguirlo políticamente y pretender su expulsión como socio.
La denuncia, respaldada por el abogado Dr. Guido Oclander, fue presentada ante la Justicia y actualmente se tramita en la Fiscalía en lo Criminal y Correccional N° 60. Acusa al presidente Abel Poza de haber accedido y difundido material audiovisual protegido por las leyes de confidencialidad y protección de datos personales, configurando presuntas infracciones a los artículos 157 bis, 153 bis, 156 y 261 del Código Penal.
El comunicado que había emitido Nadur lo podés ver acá.