Sin lugar a dudas, Ciudad de Bolívar fue el protagonista de la semana tras victoriosamente enfrentar a Atlético Rafaela en la final del Federal A, logrando así el primer ascenso en su historia a la Primera Nacional. En este escenario, las miradas se centraron en las historias de los protagonistas presentes en San Nicolás de los Arroyos.
Uno de los que captó más atención fue Enzo Álvarez, quien, a sus 25 años, es el tercer arquero de Las Águilas y se convirtió en el héroe de la tarde al detener uno de los últimos tiros en una emocionante tanda de penales.
Con el ascenso consumado y lleno de expectativas por lo que vendrá, dialogó cara a cara con Olé: sobre la constancia del equipo, los momentos previos a la definición por penales, su carrera y mucho más…
Enzo Álvarez, mano a mano con Olé
-Ya pasaron varios días de la final, ¿caíste en lo que lograron?
-Creo que con el paso de los días, las emociones han ido cambiando. Ahora me siento un poco más relajado. Al principio me costaba disfrutarlo porque lo viví desde otra perspectiva, pero estoy muy contento.
-¿Cuáles crees que fueron las claves para triunfar en San Nicolás?
-Pienso que nuestra mayor fortaleza es el grupo. Se formó un equipo muy unido y profesional que supo manejar las riendas de una situación que no siempre es sencilla. Esa fue la clave fundamental.
-¿Cómo era el día a día con el cuerpo técnico pensando en la final?
-Antes de la final, se enfocó más en la preparación psicológica que física, dado que durante todo el año ya se habían entrenado la mayoría de los aspectos y no había mucho más que ajustar en la previa.
-Te llevo a los últimos minutos del partido, ¿cómo se dio ese momento en que tenías que entrar?
-Estaba revisando el material sobre dónde podían patear los penales los jugadores de Rafaela cuando Guille (Vázquez), el entrenador de arqueros, me sugirió que empezara a moverme un poco, para no estar quieto al momento de la decisión. Y así, en el minuto 93, el técnico (Diego Funes) me preguntó si me animaba, y yo ya había decidido que, si se daba la oportunidad, diría que sí.
-¿Qué pensaste en ese instante?
-Una de las cosas que me pasó fue, al ingresar, que dejé la botella detrás del arco; al darme vuelta, vi la inmensidad del estadio. Para mí, que venía jugando en la liga, era un sueño estar allí y fue una de las emociones más grandes que sentí, aunque duró poco. Con el tiempo, me fui sorprendiendo de lo preparado que estaba psicológicamente, porque al ver imágenes y videos, me costaba entender lo presente que estaba en el partido.
-¿Te esperabas el impacto que causó el ascenso del equipo?
-La verdad, no. Siempre se decía en el club que un ascenso cambia la vida y genera mucha repercusión, pero yo pensaba en cómo terminarían los penales. Sin embargo, al bajarme del alambrado y verme rodeado de medios para una nota, o al recibir el reconocimiento como mejor jugador, eso no estaba en mis planes.
-¿Cómo vivieron los festejos?
-Estuvimos un rato en el estadio; por suerte, dejaron pasar a las familias y pudimos sacarnos fotos y disfrutar. Luego, regresamos a Bolívar, paramos en un supermercado en uno de los pueblos cerca de San Nicolás y compramos algo para comer, porque no habíamos comido ni tomado desde el almuerzo. Fue una travesía repleta de ilusión y emoción.
-Me imagino la alegría de la gente de Bolívar por tener un equipo en la Primera Nacional, ¿cómo se vive este presente del club?
-Sí, la gente se está sumando poco a poco, sobre todo porque es un club nuevo que no cuenta con inferiores. Pero se están dando cuenta del logro del equipo, ya que no es poca cosa jugar en la B Nacional y enfrentarse a equipos con historia como Colón, Patronato, Almagro, Ferro, Chicago, entre otros.
-En lo personal, ¿cómo viviste la temporada?
-Acumulé minutos en la liga local donde pudimos salir campeones, me sentía bien, aunque no había tenido continuidad en el Federal. En un momento, le mencioné a Diego (Funes) que, aunque no era mi intención irme, necesitaba buscar un nuevo lugar para sumar minutos. Casi se concreta mi salida, pero por cosas del destino, no sucedió. Y así, justo me encontré en el banco en semifinales, y desde entonces todo cambió.
-¿Qué aspiraciones tienes para el próximo año?
-Veremos qué ocurre, ojalá tenga la oportunidad de pelear el puesto en igualdad de condiciones. Pero si no se da, tengo en mente salir a préstamo en otro club, siempre y cuando las condiciones sean beneficiosas para ambas partes.









