Jannik Sinner admite que es difícil alcanzar a Carlos Alcaraz y acepta la pérdida de la corona de número uno del ranking

El Masters 1000 de París cambia de sede este año a La Défense Arena, un lugar moderno que marca el inicio del cierre de la temporada de tenis individual antes de las ATP Finals en Turín. En este contexto, las expectativas aumentan en torno a los principales jugadores del circuito, como Carlos Alcaraz y Jannik Sinner, los dos primeros en el ranking, quienes han luchado toda la temporada por el título. Sin embargo, parece que el italiano se ha resignado al segundo puesto.

Mientras todos miraban el debut de Carlos Alcaraz, que se programó para este martes contra el británico Cameron Norrie, el italiano Jannik Sinner fue quien habló con la prensa en París antes de su primer partido, previsto para el miércoles contra el belga Zizou Bergs. La experiencia del jugador transalpino en grandes eventos le ha permitido destacarse como uno de los referentes del circuito este año, y aunque hay teorías matemáticas sobre un posible ascenso al número uno mundial, el mismo Sinner se encargó de enfriar cualquier especulación al respecto.

Durante su conferencia de prensa, Sinner confirmó lo que ya se sospechaba en el ambiente del tenis: no formará parte del equipo italiano en la Final a 8 de la Copa Davis, que se desarrollará en Bolonia una vez finalizada la temporada. “La decisión está tomada, ya dije todo lo que tenía que decir”, afirmó el italiano, recordando su papel clave en las dos victorias recientes del equipo en esta prestigiosa competencia por selecciones.

El tenista italiano Jannik Sinner

Los cálculos de la clasificación mundial indican que Sinner tendría una chance teórica de superar a Alcaraz en la cima del ranking ATP en París, aunque ese escenario es poco probable. La dinámica de puntos del circuito señala que tras este torneo, Sinner perderá 1.500 puntos, mientras que Alcaraz solo 200, ya que el español defiende apenas 100 unidades en París y ningún competidor cercano suma en ese aspecto. El propio Sinner se refirió a esa posibilidad, admitiendo que la pelea por el número uno final no está entre sus metas inmediatas. “¿El número uno del año? Es imposible. Sinceramente, no estoy pensando en eso ahora. Será un objetivo para el año que viene. Este año no está en mis manos”, subrayó, despejando rumores sobre un posible cambio en la cima del ranking.

En la carrera por finalizar la temporada en la primera posición, Alcaraz tiene una ventaja de 2.040 puntos sobre Sinner. Quedan 2.500 puntos máximos en juego entre el Masters 1000 de París y las ATP Finals en Turín (1.000 y 1.500 respectivamente), así que el jugador de Murcia depende exclusivamente de sus resultados para acabar el año en la cima. Sinner aclaró que esa pelea no le causa presión ni altera su planificación.

En cuanto a su propio análisis, Sinner calificó como muy positiva su actuación en 2025. “Intentaré terminar la temporada de la mejor manera posible. Si puedo conseguir algo importante, sería increíble. Si no lo logro, ya hice cosas asombrosas este año”, señaló el italiano, quien se coronó en Wimbledon, retuvo su título en el Abierto de Australia y participó en las cuatro finales de Grand Slam, afianzando su lugar entre los mejores del mundo.

Los tres récords que Carlos Alcaraz ha conseguido lograr antes que Rafa Nadal.

Al continuar con su análisis de la temporada y mirando hacia el futuro, Sinner ofreció algunas pautas sobre su preparación para el próximo año. Considera que el trabajo previo en diciembre será clave, ya que es una oportunidad para implementar cambios significativos en su juego y dar un salto de calidad. “Diciembre será un mes vital. Siento que podemos hacer grandes cambios, trabajar mucho”, anticipó el italiano, entusiasmado con la posibilidad de mostrar una versión mejorada en 2026 y seguir siendo protagonista en la élite del tenis. El Masters 1000 de París y las ATP Finals se presentan como los últimos capítulos de un ciclo positivo para Sinner, quien mantiene sus objetivos claros y una mentalidad tranquila frente a los desafíos que se avecinan.