Si jugar en River no es para cualquiera, mucho menos lo es hacerlo en este contexto: con una serie de frustraciones que casi completa el álbum de esta temporada, la situación no es sencilla para nadie. Y no lo será, claro, este domingo, cuando River reciba a Gimnasia (LP) en un Monumental que ya se ha cansado de un equipo que no representa a los hinchas y que se ha convertido en una decepción dada la expectativa generada en enero, una expectativa que se sustentaba principalmente en Marcelo Gallardo y en varios refuerzos de renombre que llegaron gracias a su gestión como CEO.
La eliminación en la Copa Argentina ante Independiente Rivadavia en el Kempes no fue solo la gota que colmó el vaso de la paciencia, sino la siguiente: en la última derrota en el Monumental ante Sarmiento, la hinchada entonó el himno de protesta que resuena en todos los estadios del fútbol argentino, el “jugadores, la c… de su madre”, que no se escuchaba en Núñez desde hacía más de una década. La onda expansiva se sintió en Córdoba luego del último penal de Villa, y por eso, el partido de este domingo no se perfila como uno de esos fáciles de jugar. Los futbolistas y el propio Gallardo saben que, con una tolerancia nula, cualquier tropiezo futbolístico en 90 minutos puede reactivar la desaprobación general.
River Plate –
River se fue silbado por sus hinchas tras la derrota ante Sarmiento
El contundente mensaje de Gallardo
“Veremos quiénes están, porque este momento no es para cualquiera, no es para cualquiera sentarse aquí, ni salir a jugar, ni sostenerse en esta situación. Ahí es donde se muestra la hombría, los verdaderos hombres sobresalen en momentos de reprobación, crítica y mala voluntad en la opinión: todo eso va a estar presente y hay que asumirlo. Hay que ver quiénes estamos preparados para resistir y avanzar. Todos podemos atravesar un mal año deportivo, pero con otras actitudes, con otra identificación”, anticipó MG en su breve pero contundente conferencia tras la caída el viernes pasado. Consciente como pocos del sentir y el paladar del hincha de River, el Muñeco tiene claro el escenario que enfrenta y por ello dedica estos días no solo a buscar soluciones urgentes, sino también a discernir cuáles de sus jugadores están más capacitados para afrontar un partido que es casi una final en la búsqueda de la clasificación a la próxima Copa Libertadores, siendo menos un objetivo y más una obligación esencial para el CARP: sin margen de error tras el triunfo de Boca ante Barracas y con el superclásico en la Bombonera y la siempre complicada visita a Vélez en Liniers en las últimas dos fechas, no ganarle a un GELP que lucha en la zona baja podría ser casi determinante para el futuro.
Marcelo Gallardo –
Gallardo: “Tengo que tener las emociones controladas porque sino te hacen mierda”
El DT de River habló tras la derrota y eliminación de la Copa Argentina frente a Independiente Rivadavia de Mendoza
“Todos podemos tener un mal año deportivo, pero con otras formas”, aseguró
🎥 Hector Salerno
Por qué es un desafío para hombres
¿Qué significa tener “hombría” en el pensamiento de Gallardo en este momento? Para empezar, no esconderse. Ir hacia adelante, asumir riesgos. Algo que ha escaseado en River desde hace tiempo: el equipo parece paralizado, agobiado por la presión, con jugadores que, salvo contadas excepciones, no demuestran personalidad ni actitud para hacerse cargo. Esto se traduce en el campo de juego: pases hacia atrás y laterales, tenencia ineficaz y sin contundencia, síntomas de que la pelota pesa toneladas y de que para muchos impera más el miedo a perderla que la determinación de encontrar espacios. Quizás por esto, bajo la lluvia cordobesa, se destacó el joven Jaime, con una impronta audaz y aún no afectada por el proceso negativo que rodea a sus compañeros. El zurdo, como otros chicos de Inferiores, será aplaudido cuando la voz del estadio lo anuncie. También es previsible que héroes como Armani, Enzo y Juanfer reciban su reconocimiento. Y que habrá ovaciones, ya un ritual que promete sostenerse, para MG. Pero ahí, tras ese desfile de nombres, es difícil no imaginar que los silbidos recrudecerán para más de un futbolista que ha sido señalado desde hace tiempo: tras la eliminación con Palmeiras, Borja, Colidio, Castaño, Paulo Díaz, Galarza y Boselli fueron claramente reprobados por la tribuna.
Gallardo entiende que River atraviesa “un momento de mierda”. (Foto: Juano Tesone).Y es que los hinchas que llenan continuamente el Monumental se han cansado: en lo que respecta a su experiencia personal, River no gana en casa desde hace dos meses; la última victoria fue un pálido 2-0 ante San Martín (SJ) el 31/9, seguido de tres derrotas consecutivas como local (Palmeiras, Riestra, Sarmiento). Y no, no es para cualquiera…
