Independiente enfrenta una urgencia: generar recursos para cumplir con compromisos financieros inmediatos y evitar futuros problemas. La dirigencia es consciente de que el club tendrá que vender jugadores en el próximo mercado de pases para contar con dinero fresco. Hay dos futbolistas que fueron considerados para partir en el último receso invernal, pero finalmente se quedaron en Avellaneda porque no llegaron propuestas satisfactorias para el Rojo. Se trata de Kevin Lomónaco y Felipe Loyola.
El zaguero de 23 años llegó en agosto de 2024, procedente del Red Bull Bragantino, y tiene contrato con Independiente hasta el 31 de diciembre de 2027. Es pieza clave en la defensa y titular indiscutido tanto para Julio Vaccari como para Gustavo Quinteros. Su situación es peculiar, ya que el club aún no ha terminado de pagar su pase. El Rojo había acordado con los brasileños comprarlo en cuatro cuotas de 750.000 dólares, pero la primera venció en julio y solo se abonaron 400.000. Bragantino elevó un reclamo ante la FIFA por el incumplimiento y ahora no solo exige el pago de lo que resta de esa cuota, sino que pretende cobrar los 2.600.000 restantes al contado, argumentando que el acuerdo está caído por incumplimiento. En Independiente, que posee los derechos federativos, ya recibieron sondeos de México y consideran la venta de este futbolista si llega alguna oferta.
Pipe Loyola tiene vínculo hasta el 30 de junio de 2028. El chileno quedó profundamente afectado tras los incidentes ocurridos frente a Universidad de Chile el 20 de agosto y considera la posibilidad de marcharse. Por el momento, solo han habido sondeos de México y Brasil. La dirigencia espera al menos 5.000.000 de dólares para permitir su salida.
La situación de los laterales
Independiente está jugando sus últimas cartas. El equipo avellanedense aún mantiene posibilidades matemáticas de clasificar a los playoffs del Torneo Clausura y de acceder a la Copa Sudamericana de 2026. Aunque también depende de resultados ajenos, el reciente triunfo por 3-0 ante Platense les dio un respiro. En este contexto, Gustavo Quinteros está preparando al equipo para recibir mañana a Atlético Tucumán.
Leonardo Godoy y Jonathan de Irastorza tuvieron que ser reemplazados en la segunda mitad del partido frente al Calamar debido a molestias musculares, pero ambos trabajaron con normalidad durante la semana y se perfilan como titulares. Para el entrenador, esto representa un alivio, ya que Federico Vera arrastra un desgarro padecido contra San Martín de San Juan y no podrá ocupar el lateral derecho. Además, los laterales izquierdos Facundo Zabala y Milton Valenzuela también están desgarrados y, si todo marcha bien, podrían estar disponibles para el último encuentro de la fase regular de la Zona B contra Rosario Central.
 
								






