Insfrán, el ídolo de Gimnasia frente a River: “Nos daban por perdidos, nadie creía en nosotros”

No permitió que Gimnasia rompiera la resistencia que había construido con valor, sacrificio y amor propio. Era la última jugada del partido. Se agotaba el tiempo. En esa acción recaía la responsabilidad de mantener lo edificado, de evitar fisuras. Nelson Insfrán esperó a que Miguel Borja llegara a la pelota, se lanzó hacia su izquierda (como ante Sarmiento) y atajó el penal en el último minuto del descuento. El héroe de la noche desató la euforia de Gimnasia y el estallido en las tribunas de River.

El arquero del Lobo tuvo que soportar unos minutos de tensión, mientras se revisaba la jugada en el VAR, a cargo de Nazareno Arasa, quien confirmó la falta de Suso sobre Martínez Quarta (supuesto agarrón) dentro del área. Insfrán vivió esos momentos finales, buscando la concentración que lo llevó a convertirse en el futbolista decisivo para que el Lobo rompiera una racha de 20 años sin poder vencer al Millonario en el Monumental.

Sin embargo, hubo algo más relevante: con esta victoria, el Tripero prácticamente se aseguró la salvación. “Era un partido clave, sabíamos que nos daban por muertos, llegamos a una cancha muy difícil como la de River, que cuenta con jugadores de gran jerarquía. Se trató del partido donde menos se apostaba por Gimnasia. Pero el equipo sacó un plus adicional. Hubo sacrificio y concentración. Hubo recompensa”, declaró el guardameta en el campo de juego, en diálogo con ESPN Premium.

Gimnasia volvió a la victoria tras dos derrotas, la última en el clásico frente a Estudiantes (anteriormente, contra Talleres). Con la herida aún abierta y el corazón en la boca, dejaron todo en la cancha. Más allá de lo emocional, el equipo mostró orden táctico, disciplina y máxima atención en la marca.

“Esto es por el trabajo de todos. Merecíamos esto -afirmó el arquero-, somos un plantel que trabaja arduamente, que se rompe el orto. Disculpen la expresión. Hay mucha gente que quizás sufre mucho”. Además, el Mono reveló una anécdota vivida durante la semana que los motivó aún más: “Tuvimos la pérdida de la hermana de uno de los profes. Estuvimos todos juntos. En el vestuario se mencionó que debíamos hacerlo por esa persona”.

Al ser consultado sobre su decisión de lanzarse para atrapar el penal, el arquero respondió: “Es intuición, elijo un lado y voy, y esta vez me salió bien. Así que ahora, a disfrutar de esta victoria”.