En el domingo brasileño de Ferrari, todo lo que podría haber salido mal se alineó con precisión milimétrica. Doble abandono, 37 puntos de desventaja respecto a Mercedes, y eso sin haber tenido oportunidad de evaluar el ritmo de los dos coches.
El Gran Premio de la Scuderia comenzó con una carrera complicada para Lewis Hamilton en la curva 1 (golpeado por el Williams de Carlos Sainz), seguida de otro incidente (esta vez con Hamilton como culpable ante Franco Colapinto) y, finalmente, el incidente de la sexta vuelta que puso fin a la carrera para un Leclerc que, afortunadamente, no sufrió lesiones.
Charles Leclerc, Ferrari
Foto de: Anni Graf – Fórmula 1 vía Getty Images
“Después de una tarde como esta, es importante buscar los aspectos positivos del fin de semana, aunque resulte complicado encontrar alguno al final de la temporada y tras un doble abandono”, comentó Frederic Vasseur. “En la calificación Sprint conseguimos un buen resultado, en la carrera Sprint mantuvimos un buen ritmo y la calificación fue favorable para Charles. Ha sido un domingo muy difícil. Tenía la sensación de que, al menos con Charles, estábamos en una buena posición, pero pagamos el precio del contacto entre Antonelli y Piastri, lo cual es una situación muy difícil de aceptar para él y para el equipo”.
“Es frustrante”, reiteró Leclerc, “estamos luchando por el segundo puesto en el campeonato de Constructores y ahora será más complicado asegurarlo. Tendremos que afrontar los próximos tres fines de semana de manera perfecta para tener alguna oportunidad. La respuesta de todo el equipo, que logró revertir la situación de viernes a domingo, ha sido un gran esfuerzo”.
El descontento de Charles es palpable, ya que en la salida mantuvo la tercera posición que ocupaba en la parrilla, y tras la reanudación (después del coche de seguridad) disfrutó la oportunidad de posicionarse detrás del líder Lando Norris.
El incidente entre Piastri, Antonelli y Leclerc durante la reanudación tras el coche de seguridad
“Estaba en el lugar correcto”, enfatizó Vasseur refiriéndose a Leclerc, “iba segundo y luego se vio obligado a retirarse. Es decepcionante, ya que Charles se encontraba en una posición donde podría haber luchado por la victoria o al menos por el podio. En estas circunstancias, no solo se pierden puntos, sino que también se los cede a los rivales”. Leclerc aparcó su monoplaza antes de la curva 4, observando la carrera desde la zona de los comisarios, un veredicto amargo de digerir.
El calvario de Hamilton, en comparación, fue mucho más extenso. La colisión con Sainz le costó a Lewis cinco posiciones y, sobre todo, una considerable pérdida de carga al romperse el alerón delantero, que terminó bajo el fondo. Probablemente, Lewis se sintió nervioso, y poco después tuvo contacto con el Alpine de Colapinto. “Lewis tenía un buen ritmo”, subrayó Vasseur, “pero no puedes recuperarte después de dos accidentes. Retirar el coche era la decisión lógica, ya que iba último y le faltaban entre 30 y 40 puntos de carga. Ante eso, cumplimos la sanción (impuesta a Hamilton por el contacto con Colapinto) y luego retiramos el coche. Sacar conclusiones de un fin de semana así es muy complicado. Habíamos mejorado bien después de una salida difícil el viernes, pero este resultado es realmente lamentable para nosotros y para la lucha por el campeonato.”
La incertidumbre sobre si Leclerc hubiera estado en condiciones de competir seguirá sin respuesta. Ferrari ahora debe responder rápidamente el fin de semana en Las Vegas, con el objetivo primordial de arrebatar puntos a Red Bull, que ha ascendido hasta la tercera posición de la clasificación de Constructores, gracias al espectacular podio de Verstappen.
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