Miles de hinchas de Lanús se trasladaron a Asunción para ser testigos de la final de la Copa Sudamericana contra Atlético Mineiro. Ya sea por tierra o aire, en colectivos o vehículos particulares, los seguidores del club del sur de Buenos Aires recorrieron más de 1300 km para estar presentes en el Estadio Defensores del Chaco y apoyar al equipo de Pellegrino.
Esto es otra muestra de la pasión del hincha argentino. No es la primera vez que se produce una movilización masiva hacia la capital paraguaya; los aficionados de Racing hicieron lo mismo ante Cruzeiro en 2024, y los de Colón de Santa Fe en 2019 frente a Independiente del Valle. Ambos contaron con un gran despliegue y los del Granate no quisieron quedarse atrás.
La odisea de los Granates
Desde temprano, diversas imágenes y videos que circulaban en redes sociales mostraban a los hinchas de Lanús, entre cánticos y ansiedad, aguardando el inicio del partido en la calurosa tarde asuncena. Además, informes de cuentas partidarias del Grana indicaban sobre la demora de varios micros de hinchas que, a dos horas del comienzo del encuentro, estaban atascados en la frontera entre Argentina y Paraguay, en la localidad formoseña de Clorinda.
Asimismo, se reportó que había más de dos horas de espera para cruzar hacia el país vecino. Por ello, se preveía que la mayoría de los hinchas que salieron en micros desde el Estadio Néstor Díaz Pérez alrededor del mediodía del viernes llegarían justo a tiempo para el inicio del encuentro.
El colorido no podía faltar en la final del segundo torneo más importante de Sudamérica, especialmente con equipos argentinos en competencia. Contrariamente a la situación de los hinchas de Lanús, los seguidores de Mineiro ocuparon las gradas casi dos horas antes, soportando las altas temperaturas, mientras los bomberos les rociaban agua periódicamente para refrescarlos.



