El calor y la humedad han afectado considerablemente a los tenistas en Shanghái. Desde el inicio del torneo, los jugadores han tenido que luchar con las altas temperaturas y adaptarse a las condiciones climáticas locales. Novak Djokovic pagó el precio de esto y se quejó de las altas temperaturas, incluso vomitando en medio de un partido. No fue el único afectado; Jannik Sinner tuvo que retirarse del torneo por calambres, abandonando la pista cojeando.
Las altas temperaturas han dejado su huella desde el primer set, y los efectos comenzaron a hacerse notar. El partido entre Novak Djokovic y Hanfmann brindaron imágenes impactantes en el circuito y en las redes sociales. El intenso calor y la elevada humedad causaron un fuerte malestar físico en el serbio, que se evidenció en diferentes momentos del partido. Djokovic, que tuvo problemas para aguantar las condiciones, debió vomitar en medio del encuentro, un hecho inusual y que resalta las exigencias a las que son sometidos los jugadores.
En distintas ocasiones, Djokovic se retiró temporalmente hacia el fondo de la pista en busca de alivio con la toalla o para acercarse al banquillo cuando las molestias estomacales aparecían. El tenista fue visto en varias ocasiones intentando sobrellevar el impacto de las temperaturas extremas y la humedad cercana al 80%, un factor crítico para el rendimiento de todos los competidores en Shanghái. Tras el partido, Djokovic comentó sobre el reto que significa competir en tales condiciones: “Esto es igual para todos, pero es brutal tener un 80% de humedad día tras día, especialmente para quienes juegan por la mañana, donde el sol empeora todo”, expresando así la severidad del clima en la ciudad china.
El propio Djokovic profundizó en cómo percibe estas situaciones, destacando la complejidad que enfrenta para mantenerse durante el partido, que se prolongó por casi tres horas. “Para mí, biológicamente, es más desafiante enfrentar este tipo de cosas. Hoy tuve que lidiar con esta tormenta, además de que Yannick jugó un partido increíble desde el principio. No puedo pedir más, habiendo jugado casi tres horas frente a este público que gritaba mi nombre a mis 38 años en la tercera ronda de un Masters 1.000. Esto es como un sueño para mí”, explicó, reconociendo también el nivel de su oponente y el apoyo del público.
A pesar de evidentes síntomas de agotamiento y el episodio de vómitos, el triunfo de Djokovic le permitió avanzar a la siguiente fase del torneo. Sin embargo, la atención se centró en la dureza de las imágenes que resaltan la seguridad y el bienestar de los jugadores, sobre todo en condiciones climáticas tan difíciles.
Por su parte, Jannik Sinner también se convirtió en protagonista del torneo por los efectos del calor. Durante la jornada del domingo, el italiano se enfrentaba a Tallon Griekspoor, pero su físico no pudo soportarlo. Sinner tuvo un partido muy exigente contra Griekspoor, quien jugó a un gran nivel. El neerlandés llevó a Sinner a un primer set que se extendió hasta un tie-break, donde se destacó. Griekspoor aumentó la presión en la segunda manga, rompiendo el saque de Sinner en momentos clave, un escenario que pudo haber cambiado si el italiano hubiera aprovechado algunas oportunidades de quiebre, evitando así los problemas físicos posteriores.
Con una ligera ventaja de 2-1 en el tercer set, Sinner comenzó a mostrar signos de agotamiento. Desde el lado de su rival, advirtieron que “él no está cómodo, sigue empujando”, notando el deterioro físico del italiano. El número dos del mundo tuvo problemas para moverse, perdió el juego al resto y cedió su servicio, acumulando dobles faltas y limitando su capacidad de sacar con potencia debido a sus molestias físicas. La imagen de Sinner dirigiéndose al banquillo, usándolo como un apoyo con la raqueta, evidenció su estado. Aunque el fisioterapeuta fue llamado, poco pudo hacer ante la rigidez muscular que le impedía continuar.
Al finalizar el encuentro, Griekspoor comentó: “No es la manera en que quieres ganar, las condiciones han sido brutales toda la semana. Tuvimos suerte de jugar por la noche, sin sol… Lamento lo de él, le deseo una pronta recuperación”. Con 29 años y en el puesto 31 del ranking, Griekspoor logró su primera victoria ante Sinner tras seis derrotas previas. Por su parte, Jannik sufrió su segunda retirada en el año —la anterior fue en la final de Cincinnati ante Alcaraz— y la séptima en su carrera.
En Cincinnati, el calor ya había causado estragos entre los tenistas y en las gradas, donde algunos aficionados sufrieron golpes de calor. Ahora, en Shanghái, la situación se repite y muchos jugadores están soportando los efectos de las altas temperaturas.
