El All England Club ha confirmado sus planes para erigir una estatua en honor a Sir Andy Murray en Wimbledon, con el objetivo de que esté lista para 2027, reconociendo su asombrosa contribución al tenis tanto en Gran Bretaña como en el mundo.
La decisión de inmortalizar a Andy Murray con una escultura en el recinto de Wimbledon surge de una promesa del club tras sus victorias en el torneo. El tenista escocés rompió una racha de 77 años sin campeones británicos en la categoría individual masculina al vencer a Novak Djokovic en la final de 2013. Tres años más tarde, en 2016, volvió a conquistar la mítica hierba al derrotar a Milos Raonic. Estos logros no solo renovaron la esperanza en el tenis británico, sino que también solidificaron a Murray como una de las figuras más influyentes en la historia del deporte en el Reino Unido.

La confirmación oficial se dio a conocer tras la despedida de Murray del tenis profesional en agosto de 2024, después de su participación en los Juegos Olímpicos de París. La presidenta del All England Club, Debbie Jevans, explicó en el pódcast Ainslie + Ainslie Performance People que el club ya ha iniciado conversaciones con Murray y su equipo para llevar a cabo este homenaje. Jevans señaló que la intención es inaugurar la estatua durante la celebración del 150.º aniversario del primer campeonato de Wimbledon, que se llevó a cabo en 1877. “Estamos trabajando para tener una estatua de Andy Murray aquí (en Wimbledon) y colaboramos estrechamente con él y su equipo,” afirmó Jevans, destacando la relevancia de que Murray participe activamente en el proceso de diseño y ejecución.
La tradición de honrar a los grandes campeones en Wimbledon cuenta con un antecedente notable: en 1984 se erigió una estatua de bronce de Fred Perry, el último británico en ganar el torneo antes de Murray, para conmemorar el 50.º aniversario de su primer título individual. La estatua de Perry ha sido una constante fuente de inspiración para Murray a lo largo de su carrera. En declaraciones a BBC Sport, el escocés manifestó su orgullo por este reconocimiento: “Estoy muy orgulloso, no hay muchas estatuas en el recinto, y siempre recuerdo haber visto la de Fred Perry mientras caminaba por los jardines en mi camino a entrenar y practicar allí a lo largo de los años. Será algo verdaderamente especial.”

El proceso de creación de la estatua de Murray se plantea como un trabajo conjunto entre el club y el propio tenista. Jevans subrayó que Murray debe estar “muy involucrado” en cada fase, desde la ideación artística hasta la ubicación final de la obra. El objetivo es que la escultura no solo celebre sus logros deportivos, sino que también capture su esencia y el impacto que ha tenido en el club y en el tenis británico. “Ahora que se ha retirado, estamos considerando cómo integrarlo para que forme parte del club a largo plazo.”, agregó Jevans, quien también mencionó que el club se inspira en el homenaje a Rafael Nadal en Roland Garros, donde se le dedicó una placa conmemorativa.
La figura de Andy Murray trasciende sus triunfos en Wimbledon. Su carrera ha estado marcada por la perseverancia, la superación de lesiones y un compromiso inquebrantable hacia el deporte. Su primer título en 2013 no solo rompió un récord histórico, sino que también inspiró a una nueva generación de tenistas británicos. La segunda victoria en 2016 reafirmó su lugar como uno de los grandes del tenis mundial. Además, Murray ha sido un referente en la lucha por la igualdad de género en el deporte y ha utilizado su plataforma para abordar temas sociales relevantes.
El homenaje que planea el All England Club busca reconocer no solo los éxitos deportivos de Murray, sino también su legado humano y su influencia en la cultura del tenis. La estatua se sumará a un selecto grupo de monumentos en el recinto de Wimbledon, donde la singularidad de estos reconocimientos resalta la magnitud de la distinción. “Con Wimbledon y su atención al detalle, espero que la estatua sea magnífica,” declaró Murray, expresando su confianza en el club y su entusiasmo por el proyecto.

La noticia ha generado una ola de reacciones positivas en el ámbito del tenis y entre los aficionados británicos, que ven en Murray un símbolo de perseverancia y excelencia. La estatua será un recordatorio permanente de sus logros y una fuente de inspiración para futuras generaciones de deportistas. El proceso de diseño y construcción de la escultura, que se espera finalizar en menos de tres años, representa un nuevo capítulo en la relación entre Murray y Wimbledon, una historia marcada por la pasión, el esfuerzo y la gloria deportiva.