El eco de la victoria de Los Pumas sobre los All Blacks en Buenos Aires resonó con fuerza en la prensa de Nueva Zelanda, que no escatimó en calificativos para su selección, resaltando su “indisciplina” y la superioridad argentina durante el enfrentamiento. Los medios neozelandeses, lejos de minimizar el impacto, reconocieron el triunfo histórico del equipo liderado por Felipe Contepomi, mientras que los visitantes pagaron caro por sus errores, evidenciados en tres tarjetas amarillas.
El resultado de 29-23 a favor de los argentinos en el estadio de Vélez marcó la primera ocasión en que Argentina derrotó a los All Blacks en su propio territorio, añadiendo así la cuarta victoria en la historia de duelos entre ambos seleccionados. El encuentro se destacó por su intensidad física, la escasez de espacio para los backs y un contacto constante, en el que ni el tradicional haka logró intimidar a los locales.
La prensa neozelandesa se tomó en serio la autocrítica. El portal Stuff tituló: “Los All Blacks, indisciplinados, sufren su primera derrota ante Los Pumas en Argentina”, y destacó que el equipo argentino “mereció plenamente su éxito en este partido”, señalando que los All Blacks tienen “una montaña de trabajo por delante”.

Por su parte, 1News destacó: “Los Pumas hacen historia al aplastar a los All Blacks en casa”, enfatizando que “una Argentina inspirada venció por primera vez en su estadio a los All Blacks, pero la mala disciplina de los visitantes, que se tradujo en tres tarjetas amarillas, les costó cara en Buenos Aires”.
El New Zealand Herald también subrayó la relevancia histórica del encuentro: “Historia para Los Pumas. El equipo de Felipe Contepomi rompió su barrera al sorprender a los erráticos All Blacks en casa por primera vez”.
El desempeño de Los Pumas en este partido mostró una mejora notable en comparación con el encuentro anterior, donde sufrieron una derrota en Córdoba. La solidez exhibida en varios pasajes del juego permitió al seleccionado argentino imponerse ante lo que es considerado el mejor equipo del mundo, que no pudo hacer valer ni la fuerza de su camiseta ni el ADN que caracteriza al rugby de Nueva Zelanda.

Esta victoria se inscribe como uno de los capítulos más destacados en la historia del rugby argentino. Hasta este sábado, Nueva Zelanda era la última de las grandes potencias que permanecía invicta en territorio argentino. Calificado como “Tier 1”, el rugby mundial incluye a Argentina, Nueva Zelanda, Australia, Sudáfrica, Escocia, Francia, Gales, Inglaterra, Irlanda e Italia; de estos diez equipos, nueve ocupan actualmente los primeros lugares en el ranking de World Rugby.
El recorrido de Los Pumas ante las potencias comenzó en 1968, cuando vencieron a Gales por 9-5 en GEBA. A lo largo de los años, el seleccionado argentino logró victorias ante Escocia (20-3 en 1969) e Irlanda (8-3 en 1970), ambas en Buenos Aires. En 1979, con Hugo Porta como figura, se produjo el primer triunfo ante Australia (24-13 en Ferro).

El siguiente hito se alcanzó en 1985, cuando el equipo entrenado por Héctor Silva y Ángel Guastella superó a Francia por 24-16, también en Ferro. Ya en la cancha de Vélez, Los Pumas lograron nuevas victorias sobre Italia (21-16 en 1989) e Inglaterra (15-3 en 1990).
Solo quedaban dos grandes rivales: Sudáfrica y Nueva Zelanda. En 2016, Argentina derrotó a los Springboks por 26-24 en Salta, gracias a un penal definitivo de Santiago González Iglesias a tres minutos del final. Finalmente, la victoria ante los All Blacks en Buenos Aires completa la lista, consolidando a Los Pumas como un equipo capaz de imponerse ante todas las potencia del rugby mundial.
“Primero, quiero agradecer a toda la gente por alentarnos hoy. La verdad es que fue una fiesta. Estoy feliz por el equipo. Siempre digo que ganamos y perdemos juntos, y ver la felicidad de los chicos que no jugaron, estaban muy contentos con toda la gente del staff y las familias. Así que, somos 15 o 23 los que usamos la camiseta, pero el apoyo detrás a veces no se ve. Es muy importante, estoy orgulloso del equipo. Tuvimos buenos momentos en el partido, otros no tanto, pero siempre seguimos en la pelea”, comentó Julián Montoya, capitán de Los Pumas, en diálogo con ESPN.
“Pusimos el cuerpo en cada jugada y en cada partido. A veces se da mejor y otras peor. De hecho, ahora lo pienso y hubo oportunidades que no aprovechamos, como el final del primer tiempo donde nos perdimos dos tries. Creo que el rugby es eso, dejar de lado la perfección y lo mejor es quedarse en la pelea. En el contacto estuvo la clave. Estoy muy feliz, fue el último partido de Nahuel (Tetaz Chaparro), hay muchas emociones juntas y será un día muy especial que no olvidaré nunca en mi vida”, añadió el hooker tras una victoria inolvidable.