La partida de Carlos Sainz Jr. de Ferrari y su incorporación a Williams Racing representó un importante cambio en la Fórmula 1. El piloto español, luego de meses de incertidumbre y presión, fue entrevistado en el podcast High Performance, donde compartió su experiencia a lo largo de este proceso y las razones que lo llevaron a elegir el proyecto de Williams como su próximo paso profesional.
Sainz estaba en plena preparación para la temporada 2024 cuando, a finales de enero, recibió la noticia de que no continuaría en Ferrari. Aunque las negociaciones para la renovación de su contrato parecían progresar, se habían estancado sin explicación aparente. “Nunca sospeché nada. Siempre me decían que solo faltaban detalles y que sería un contrato fácil de cerrar”, relató.
Así, la confirmación de la llegada de Lewis Hamilton lo sorprendió por completo y lo obligó a replantear su futuro de inmediato. Sobre esto, reconoció: “Fue un shock. Pasé de pensar que seguiría en Ferrari a estar fuera. Me tomó una semana asimilarlo”.

Opciones y proceso de decisión
Frente a la certeza de que no había vuelta atrás, el piloto madrileño se dedicó a buscar nuevas oportunidades. Contactó a todos los equipos posibles, incluyendo Mercedes y Red Bull, aunque las opciones en estas escuadras fueron disminuyendo conforme pasaron los meses. “Si tienes un 5 o 10% de posibilidades, luchas. Pero cuando es cero, solo queda mirar hacia adelante y demostrar tu valía en otro lugar”, explicó.
Este proceso resultó particularmente desafiante, con altibajos emocionales y la presión adicional de competir al más alto nivel mientras se gestionaba su futuro. Al respecto, confesó: “Fue muy estresante. Mi familia lo notó; mi madre me llamaba más de lo habitual para preguntarme cómo estaba”.
La posibilidad de integrarse a Red Bull estuvo condicionada por su relación previa con Max Verstappen en Toro Rosso, aunque el entrevistado aclaró que la relación entre ambos es buena y que no comprende por qué esa rivalidad inicial podría haber sido un obstáculo. “Nos llevamos bien. Si esa fue la razón, no la entiendo. Creo que seríamos una pareja muy fuerte”, afirmó.
En cuanto al equipo Mercedes, admitió que fue considerado como una opción para la temporada 2025, pero nunca estuvo realmente cerca de concretarse.
Su decisión de unirse a Williams llegó tras meses de reflexión y diálogos con James Vowles, director del equipo británico. Sainz valoró especialmente el liderazgo de Vowles y la transparencia con la que le presentó el proyecto. “James se acercó a mí mucho antes de que se supiera nada sobre mi salida de Ferrari. Me dijo que me veía como la persona ideal para liderar el resurgir de Williams”, recordó.
La honestidad fue clave; Vowles le advirtió que no debía esperar grandes resultados en 2025 y que el objetivo realista para volver a ganar carreras se sitúa en 2027 o 2028, con 2026 como un año crucial para dar un salto competitivo. “Agradecí mucho esa sinceridad. Venía de un equipo donde me decían una cosa y luego hacían otra”, enfatizó Carlos Sainz.

Cultura de equipo y madurez personal
El piloto español subrayó el ambiente laboral y la cultura de equipo como elementos clave en su decisión. “En Williams he encontrado una familia que trabaja unida hacia un objetivo desafiante: volver a ser competitivos. Me siento querido y respaldado, y eso es fundamental para cualquier deportista”, aseguró.
Comparó su situación actual con sus etapas anteriores, especialmente con Toro Rosso, donde la rivalidad interna era intensa y el clima resultaba agotador. Por esta razón, resaltó: “En Toro Rosso era una lucha constante por sobrevivir. Ahora, con Alex Albon en Williams, competimos intensamente en la pista, pero fuera de ella compartimos información y trabajamos en conjunto para mejorar el coche. La madurez nos permite dejar el ego de lado por el bien del equipo”.
Sainz no ocultó su desagrado hacia la política interna que predomina en la Fórmula 1. “Es el aspecto que más detesto del deporte. Hay un 20% de factores ajenos al rendimiento puro, como los patrocinadores o el dinero, y esos pueden determinar quién ocupa un asiento”, lamentó.
El automovilista también reflexionó sobre el rol de su entorno familiar en los momentos difíciles. Tras la operación de apendicitis que lo obligó a perderse una carrera, su familia fue fundamental en su recuperación y en el proceso de toma de decisiones sobre su futuro. “Mi padre me ayudó mucho a recuperarme como atleta. Ganar esa carrera después de la operación fue uno de los momentos más felices de mi vida, y lo sentí como una victoria compartida con mi familia”, relató.

Objetivos y visión de futuro
Respecto a sus expectativas en Williams, Carlos Sainz Jr. se muestra ambicioso pero realista. Su objetivo sigue siendo convertirse en campeón del mundo, aunque reconoce que el camino será extenso. Ante esto, afirmó: “Quiero ser competitivo lo antes posible. Si algún día tengo un coche capaz de ganar el campeonato, daré todo para lograrlo. Si ese momento no llega, estaré en paz sabiendo que he dado lo mejor de mí”.
La experiencia del piloto madrileño refleja la trascendencia de la honestidad, el liderazgo y el ambiente de equipo en la élite del automovilismo, así como la madurez que se adquiere al superar obstáculos. Con su llegada a Williams, enfrenta un nuevo desafío, convencido y agradecido por la confianza depositada en su experiencia.