Franco Colapinto llega al Gran Premio de Bakú con el reto de recuperar una temporada complicada en la Fórmula 1, marcada por malos resultados y una ubicación incómoda en la tabla. En la antesala de la carrera, el piloto argentino habló con ESPN, abordó los rumores sobre su futuro y analizó las claves del circuito urbano, además de recordar su actuación destacada en la capital de Azerbaiyán en 2024.
Desde el paddock, Colapinto intentó bajar el dramatismo alrededor de las versiones sobre su continuidad en la máxima categoría. Consultado sobre lo que ocurrirá la próxima temporada, reconoció: “Es un poco como lo estuve haciendo siempre. No se puede controlar lo que pasa alrededor, ese ruido externo no es algo que me esté influyendo, pero hay que saber controlarlo”. Con esa lectura puso en evidencia la presión extra que genera el entorno competitivo de la F1: “Al final, hay muchas expectativas y mucha gente que quiere que nos vaya bien y a veces cuando no sale hay críticas”.
El piloto reconoció que la campaña actual está lejos de lo esperado para él y el equipo. “No estamos en una posición que queremos, no estamos sumando puntos, últimos en el campeonato. No es un buen año por ahora”, afirmó el joven corredor, que se convirtió en foco de atención por su potencial. Sin embargo, remarcó el aprendizaje que aportan los momentos difíciles: “En lo personal, lo importante es seguir progresando, estar cómodo con el auto, más consistente. Creo que lo voy encontrando. Se vendrán mejores circuitos. Con esta recta larga nos va a costar, pero lo vamos a intentar y tener un buen resultado”.
Cabe destacar que el bonaerense llega en alza: sus tres últimas carreras fueron las mejores al volante del A525, considerado el peor auto de la parrilla. Más allá de los rumores que circulan en la prensa europea, por lo que pudo averiguar Infobae, el futuro de Colapinto —salvo un inconveniente importante en las próximas competencias— sería ocupar un lugar como titular y acompañar a Pierre Gasly en Alpine en 2026.
En zona mixta, en declaraciones reproducidas por Motorsport, el argentino mantuvo la misma postura y destacó que esas versiones no lo afectan. “No. Ha habido muchos rumores y no los leo mucho. Estoy acostumbrado y así es, ya sabes, el deporte, la Fórmula 1, cualquier deporte. Los atletas necesitan acostumbrarse a ello”, esbozó.
Al ser preguntado directamente sobre qué había conversado con Flavio Briatore para asegurar su lugar en 2026, respondió: “La verdad es que no lo sé. No me corresponde decidir”. “Simplemente estoy contento donde estoy ahora, más contento que antes, por supuesto. Estoy trabajando bien con el equipo, eso es lo que quería. Estoy logrando prácticamente todos los aspectos personales o objetivos que tenía desde el principio y ahora me estoy acercando a eso y lo estoy logrando. Pero, por supuesto, sabemos que el rendimiento es complicado. No tenemos un coche muy consistente. El algunos circuitos somos bastante competitivos, en otros nos falta bastante ritmo y eso… Pero en general, estoy contento con la mejora que he logrado con mis ingenieros y el resto del equipo”, añadió.
En lo técnico, Colapinto detalló las complicaciones del trazado callejero de Bakú, uno de los más exigentes del calendario. “Creo que tenés que manejar… lo importante es la confianza, al no tener margen de error, no tener escapatoria, al no poder pasarte de largo, lo más importante es tener la confianza de que el auto haga lo que querés que haga”, explicó. Y añadió: “Ese feeling hace de que podés pasar cerca y no sentís que estás en un callejero, sino en un circuito normal. Eso es lo más importante. Es complicado llegar a ese punto”.
El piloto hizo un balance de su paso por los circuitos urbanos del año pasado, donde, según recordó, rindió bien tanto en Bakú como en Singapur. “El año pasado los circuitos callejeros me cayeron bien, como Bakú y Singapur. Este año el auto me está costando más tener confianza, hay que ir de menos a más, progresando”, apuntó. Al evaluar la realidad actual, Colapinto admitió las limitaciones del monoplaza en las rectas a alta velocidad, un aspecto clave en la pista de la capital azerí: “Con esta recta larga nos va a costar, pero lo vamos a intentar y tener un buen resultado”.
El recuerdo más vívido del argentino en Bakú ocurrió en 2024, cuando, todavía aclimatándose a la estructura de Williams (era su segunda carrera en la Máxima), ubicó al histórico equipo británico en el octavo puesto y sumó sus primeros puntos en la categoría. “Fue bien, fue un fin de semana que parecía difícil porque era mi segunda carrera en la F1, en un circuito callejero, de los más difíciles. Andar bien fue positivo, también para mi futuro. Me pone contento volver acá, me trae buenos recuerdos. Sumé mis primeros puntos, fue mi primera Q3”, relató.
“Hay que ver este fin de semana, va a ser más complicado que el año pasado en cuanto a performance, hay muchas rectas y este auto no es el mejor. Es un circuito callejero, con muchos baches. Trataremos de dar lo mejor y buscar cada detalle para estar más cerca de esa performance que buscamos”, remarcó. Y luego, concluyó: “En este tipo de circuitos lo más importante es el feeling, estar conectado con el auto, buscar esa velocidad sin saber que te vayas de trompa”.
En la previa al GP de Azerbaiyán, Franco Colapinto también dialogó con F1TV. Al ser consultado sobre si aprendió a hablar en francés, el argentino soltó una ocurrente respuesta: “No, francés, lo estoy intentando de verdad. De hecho, estoy dedicando mucho tiempo a Duolingo, pero por ahora no estoy consiguiendo resultados. Así que… Estoy trabajando en ello. La verdad es que me enfado mucho cuando no entiendo a Pierre y empieza a hablar en francés. Así que sí, estoy en ello. Ya lo conseguiré, pero me está costando un poco más de lo que esperaba. Así que sí. Sí, pronto hablaré un poco más”.