28 de agosto de 2025 00:51

Djokovic reflexionó sobre la partida de Nadal y Federer: “Una parte de mi carrera se fue con ellos”, destacando salud mental y legado familiar.

Durante el podcast de Jay Shetty, el tenista expresó el impacto emocional que generó la despedida de sus grandes rivales y cómo ese momento marcó un cambio en su trayectoria deportiva, además de destacar la importancia de la salud mental y el legado familiar en su vida

En un nuevo episodio del podcast de Jay Shetty, Novak Djokovic compartió su historia personal y reflexionó sobre los factores que lo llevaron a alcanzar la élite del tenis. Durante la entrevista, el actual número 7 del ránking analizó en profundidad la resiliencia, el valor de la salud mental y el sentido de propósito, abordando cómo la adversidad, la presión familiar e incluso las expectativas nacionales moldearon su carácter tanto dentro como fuera de la cancha.

Nacido y criado en Serbia en un contexto marcado por la guerra, la pobreza y las sanciones internacionales, Djokovic enfrentó numerosos desafíos desde su infancia. Como el mayor de tres hermanos, asumió responsabilidades a una edad temprana, especialmente tras un momento crucial en que su padre le entregó 10 marcos alemanes y le reveló que era todo lo que tenían para la familia.

Apenas con doce años, entendió que el éxito no era una opción, sino una condición indispensable para la supervivencia de su familia. Esta situación se complicó por la escasa tradición tenística en su país y la búsqueda constante de recursos, lo que generó una presión adicional sobre su entorno familiar.

Influencias familiares y formación integral

La influencia de su entorno familiar fue determinante en el desarrollo de Novak Djokovic. En el podcast de Jay Shetty, el tenista serbio destacó la importancia de su madre, a quien califica como “la tenista” de la familia, por inculcarle una visión íntegra del tenis y una filosofía de vida amplia. “Mi madre siempre me enseñó que el partido más importante se juega fuera de la cancha”, afirmó Djokovic. Desde pequeño, su formación combinó entrenamiento físico, visualización, música clásica, poesía y ejercicios de atención plena. “Crecí creyendo que la mente necesita el mismo trabajo que los músculos”, aseguró.

El tenista serbio destaca la

Este enfoque multidimensional, junto con la apertura a diversas tradiciones espirituales y una inclinación por el autodescubrimiento, sentó las bases de una disciplina que se fortaleció con el tiempo. “Meditar, visualizar y practicar la atención plena me permitieron sobrellevar los momentos más difíciles de mi carrera”, explicó el número uno del mundo, quien considera que cuidar la mente es esencial en cualquier ámbito, no solo en el deportivo.

En la entrevista, Djokovic enfatizó la importancia de la salud mental y la gestión emocional en su rendimiento. La oración, la meditación y la respiración consciente son prácticas que forman parte de su vida diaria. Reconoció que, incluso después de años de trabajo interior, aún enfrenta desafíos emocionales: “Todos tenemos pensamientos negativos, incluso los monjes tibetanos. La diferencia radica en cómo elegimos responder”, reflexionó.

Jay Shetty entrevista a Novak

Para Djokovic, aceptar la vulnerabilidad ha sido fundamental. “No pienso ocultar mis emociones ni mis miedos. Reconocerlos es la única forma de seguir creciendo,” apuntó. Además, enseña a sus hijos la importancia de los momentos de aburrimiento e introspección. “En el silencio surgen las mejores ideas”, afirmó.

Derrotas, presión y reconstrucción interior

Djokovic fue honesto sobre su relación con la derrota y la presión mediática. “Después de perder, necesito aislarme. Es mi forma de procesar y entender lo que ocurrió sin voces externas”, confesó. Aprendió a convertir el ambiente hostil de la grada en motivación: “Muchas veces sentí que el público apoyaba más a mi rival.” Aprendí a imaginar que los cánticos eran para mí, transformando esa energía en combustible. Considera que el mayor desafío no es el rival en la cancha, sino el mental: “El juego interior es el verdadero reto”.

Djokovic reconoce que una parte

La retirada de Roger Federer y Rafael Nadal lo llevó a replantearse su rol en el circuito. “Una parte de mi carrera se fue con ellos, pero ahora la responsabilidad es transmitir lo que aprendí a los jóvenes”, reconoció Djokovic. Ve el futuro del tenis como una oportunidad para compartir. “Me gustaría ver cómo la próxima generación supera lo que hemos logrado. Es el ciclo natural del deporte”, declaró.

Bienestar, legado y propósito

Fuera de la cancha, Djokovic ha volcado su energía en el bienestar y la innovación. Desde 2017, promueve Cyla, una marca de suplementos de hidratación y salud, y Regenesis Pod, una cápsula multisensorial destinada a la recuperación física y mental. “Mi verdadera vocación es ayudar a la gente a vivir mejor. Todo lo que aprendí en el tenis quiero compartirlo fuera de la pista”, explicó. Considera que la industria del bienestar es una extensión de su propósito. “El mayor éxito es inspirar a otros a cuidarse”, afirmó.

El legado y el sentido de trascendencia ocupan un lugar central en su filosofía. Djokovic siente admiración por figuras como Kobe Bryant y reconoce la importancia de su esposa Jelena: “Es mi ancla, el apoyo que me equilibra.” Está convencido de que el valor de su carrera no se limita a los títulos: “Lo realmente significativo es el impacto positivo que dejas. El único legado auténtico es inspirar y contribuir al bienestar de aquellos que te rodean”.

Jelena, esposa de Djokovic, es

Así, a través de sus declaraciones, Djokovic revela el trasfondo humano y espiritual de su éxito, mostrando una faceta consciente y generosa de uno de los atletas más destacados de las últimas décadas.