2 de septiembre de 2025 02:51

El conmovedor mensaje de Prigioni a la Selección de básquet tras la derrota en la final de la AmeriCup contra Brasil

La selección argentina de básquet no pudo revalidar su título en la AmeriCup, al perder frente a Brasil por 55-47 en la final que se llevó a cabo en el Polideportivo Alexis Argüello de Managua, Nicaragua. Bajo la dirección de Pablo Prigioni, el equipo enfrentó su cuarta final consecutiva en este torneo, quedándose a un paso de volver a consagrarse tras el triunfo de 2022. A pesar de la derrota, el entrenador expresó su orgullo por el desempeño de sus jugadores, y la Confederación Argentina de Básquet compartió un video en redes sociales mostrando el ambiente en el vestuario albiceleste.

En noviembre comienza la ventana para el Mundial… Yo sueño con ir al Mundial con ustedes. Y espero que también les quite el sueño a ustedes. Ese es nuestro objetivo”, les comentó Prigioni a sus jugadores en el vestuario, durante el fragmento que publicó la cuenta oficial de la CAB.

La actuación individual de cada uno, y como equipo, cambió el enfoque de la segunda etapa. No solo vinimos con un grupo joven a acumular experiencia, ya que había nueve debutantes. Nueve de ustedes es su primer torneo en América, y se llevan esta medalla (mostrando la medalla). Todos hubiéramos querido el oro, pero esto no es poco. Valoren lo que hicieron, no es poca cosa”, continuó el entrenador del equipo nacional.

Siguiendo esa línea, agregó: “El objetivo tiene que ser el máximo, el techo, como hicieron en esta concentración. Es lo último que les pido”. Al concluir su discurso, todos los jugadores se agruparon en el centro del vestuario tras la derrota para animarse mutuamente y prepararse para los próximos desafíos.

La misma actitud expresó Pablo Prigioni en la conferencia de prensa posterior a la derrota. “Lo primero que me deja es que con estos chicos no hay límites. Es un grupo muy divertido de trabajar. No hay que demandarles esfuerzo, siempre están dispuestos a darlo todo. Pero sobre todo, el crecimiento que han mostrado en estas cinco semanas”, analizó.

Además, añadió: “Han superado todas las expectativas. Estuvieron muy cerca de llevarse el torneo, y la enseñanza es clara. Si encuentras un grupo que está listo para esforzarse y trabajar en equipo, no tienen límites. Pueden llegar a lugares que ni siquiera imaginaban”.

“Les dije a los chicos que, en algún momento de la preparación, incluso durante el torneo, cambiaron el objetivo y manifestaron: ‘Está todo bien, el desarrollo y la experiencia son importantes, pero queremos ganar el torneo’. Lo demostraron con sus acciones, en cómo se fueron superando en su juego, tanto individual como colectivo. Nos vamos con buenas sensaciones; ojalá esto sirva de base para construir un grupo que siga representándonos”, concluyó Prigioni.

En cuanto al desarrollo del encuentro, se destacó la escasa eficacia ofensiva de ambos equipos, lo que se reflejó en el bajo puntaje. En el primer cuarto, la intensidad y el control de los rebotes ofensivos permitieron a Argentina mantenerse en partido, con Gonzalo Corbalán logrando cuatro rebotes en los primeros seis minutos. Sin embargo, Brasil terminó el primer parcial con una ventaja mínima de 16-15.

Durante el segundo cuarto, la diferencia en rebotes se redujo y continuó la baja efectividad en los tiros. Brasil mejoró ligeramente su puntería desde el perímetro, logrando ampliar la ventaja y alcanzar el descanso liderando 31-24. El análisis de la primera mitad evidenció que las pérdidas de balón fueron una desventaja para Argentina, que acumuló ocho pérdidas frente a solo dos de Brasil. Además, el equipo brasileño dominó los robos, con seis contra dos.

Al comenzar el segundo tiempo, Argentina realizó un rápido parcial de 4-0 en poco más de un minuto, pero Brasil reaccionó de inmediato. El equipo de Petrovic reforzó su defensa, anotando un parcial de 9-0 y alcanzando una ventaja máxima de 40-28 en los primeros cuatro minutos y medio del tercer cuarto. A pesar de las dificultades en anotar, la selección albiceleste logró reducir la diferencia a 36-42 al final del tercer periodo, gracias a su intensidad defensiva y el control de los rebotes ofensivos.

El último cuarto comenzó con un nuevo empujón de Brasil, que estableció un parcial de 8-0 en solo tres minutos, alcanzando su máxima ventaja de 14 puntos con el marcador en 50-36. Argentina intentó reaccionar en los minutos finales y, a 2 minutos y 30 segundos del final, logró acortar la diferencia a siete puntos. Sin embargo, después de una jugada revisada que permitió a Brasil mantener la posesión, un triple de Vitor Benite sentenció las esperanzas del equipo argentino.

En las tres ediciones anteriores de la AmeriCup, Argentina había perdido la final contra Venezuela en 2015, cayó ante Estados Unidos en 2017 y venció a Brasil en 2022. Para llegar a esta nueva final, el equipo de Pablo Prigioni superó a Puerto Rico en tiempo suplementario en cuartos de final y derrotó a Canadá en semifinales.