En un fútbol argentino tan físico y encorsetado, donde a menudo las patadas superan a la magia, la gambeta se percibe como un gen casi extinto en medio de tanta táctica. El incentivo se enfoca en resistir, protegerse y asegurar los puntos. Ya no parece haber espacio para la creatividad, y mucho menos para aquellos firuletes que culminen en goles. Pero Luis Marcelo Torres, en un instante de inspiración divina, desafió las convenciones.
En un partido contra Platense como visitantes, por la fecha 16 del Torneo Clausura, el Chelo anotó un gol digno de película, reminiscentemente similar a aquella icónica jugada de Pelé en el Mundial de 1970. Sin embargo, no se trató de O Rei, sino de Torres; un auténtico rebelde en un deporte automatizado. Mirá en Diario el golazo del delantero de Gimnasia La Plata.
El golazo del Chelo Torres
El encuentro comenzó de forma prometedora para el Lobo, gracias a un gol de Manuel Panaro (20´) tras un error de Andrés Desábato, el arquero del Calamar. Sin embargo, lo mejor del conjunto platense llegó en el minuto 41: el Chelo Torres se desmarcó, corrió al espacio y, tras un pase profundo de Jeremías Merlo, eludió con un toquecito a la derecha a Desábato y estableció el 2-0. Un verdadero arte.
Gimnasia La Plata –
Gran definición de Torres para el 2 a 0 de Gimnasia
Esa chispa de creatividad, sin duda, competirá por el título de la mejor anotación del actual certamen. Casi sin ángulo, el atacante logró colocarla en el arco y convirtió su sexto gol en 16 partidos vistiendo la camiseta del Tripero. Por supuesto, y guardando las distancias, la impresionante definición del nueve de Gimnasia evocó uno de los momentos más memorables de Pelé: el gol que no fue.
El gol de Pelé que no fue
Era el año 1970. Brasil se enfrentaba a Uruguay en las semifinales de la Copa del Mundo de México y la leyenda del Santos disputaba su última edición del campeonato de la FIFA. Para la segunda mitad, la Verdeamarela ya había tomado la delantera 3-1, y el intenso calor en el Estadio Jalisco, Guadalajara, estaba pesando en las piernas de los jugadores. A pesar de ello, como si fuera un chiquillo, O Rei (30 años) realizó una fenomenal carrera en los minutos finales del partido.
Tostao envió un pase profundo y, como una gacela, el 10 se lanzó al espacio, eludiendo al arquero uruguayo con una finta, sin tocar la pelota. Ladislao Mazurkiewicz quedó descolocado y Pelé se acercó al balón para patear. Pero, increíblemente, el crack erró el tiro, enviándola fuera con un remate cruzado. Ahora, más de 50 años después, el Chelo Torres desafió a la lógica y marcó el gol que Pelé no pudo lograr.








