Sin poseer el balón, el sacrificio que realizó Racing frente a Flamengo fue monumental. El desgaste se hizo evidente, especialmente durante los minutos finales. Gastón Martirena fue uno de los que más tuvo que desplazar. Le costó el primer tiempo frente a Carrascal y Alex Sandro, a pesar de la ayuda de Solari. Se sintió más cómodo en el segundo tiempo.
Martirena y el desafío físico de Racing
“Fue un partido muy difícil. Estas instancias son complicadas, un adversario formidable, pero estos encuentros nos revelan para qué estamos. No dejo de confiar en mis compañeros ni en el club; estamos más unidos que nunca y quedan 90 minutos en nuestra cancha. Nuestra casa también es exigente. Veremos cómo nos va; confío en el equipo, que está en un gran momento”, afirmó el lateral uruguayo ya entrada la madrugada en Río de Janeiro.
El lateral y su respuesta a Olé sobre la ventaja de local en Avellaneda
Al ser consultado por Olé sobre el esfuerzo físico, Martirena admitió lo complicado que fue hacerse fuerte en el Maracaná. “Era un encuentro en el que había que correr. Desafortunadamente, había que correr mucho. Ellos juegan muy bien, pero en Avellaneda será otra historia. La ventaja de local pesará, ojalá que lo ganemos todos”, dijo Gastón. Y añadió: “Vamos a ir a buscarlo, será diferente. Estamos en desventaja, será un partido complicado, pero tenemos fe y confianza en que todo saldrá bien”.
Finalmente, se refirió a la importancia del mensaje que transmite Gustavo Costas y el apoyo de la hinchada de Racing. “Gustavo es pura entrega, puro corazón. Todos tiramos para el mismo lado, hay buena energía pase lo que pase. Que confíen, que todos empujen en la misma dirección porque necesitamos a todos los jugadores, cuerpo técnico y gente. Ellos también juegan. Vamos a dejar la vida por este club, por esta hermosa camiseta”.
“A la gente no puedo decirle nada. A mí me costó mucho. Siempre lo he agradecido; vengo desde abajo. Que sigan apoyando, el partido lo vamos a ganar todos. Es para disfrutar, no queremos quedarnos aquí”.
