1 de septiembre de 2025 17:27

El peluquero de Carlos Alcaraz revela detalles de su relación con el tenista y su trabajo a puertas cerradas

El impacto de Carlos Alcaraz en el deporte va más allá de la pista. En el US Open, logró acceder a cuartos de final tras vencer a Arthur Rinderknech. Uno de los más favorecidos con su éxito es su peluquero habitual, Víctor Martínez, quien dirige una barbería en El Palmar, un barrio en las afueras de Murcia, la tierra natal del tenista. Desde hace más de dos años, Martínez es responsable del estilo que lleva el número dos del mundo.

La creciente popularidad de Alcaraz, junto a su personalidad abierta, ha convertido la visita al barbero en un evento que trasciende lo privado. Según cuenta Martínez, el fenómeno ha crecido y es evidente para quienes visitan su negocio. “Después de cada torneo importante, recibo mensajes y llamadas de personas que quieren el mismo corte que Carlos”, relata Martínez en una entrevista con CNN Sports, señalando que el estilo del tenista se ha vuelto una de las solicitudes más comunes entre niños y adolescentes de la región.

Entre los cortes más solicitados están el degradado lateral con la parte superior más larga, un sello personal que se vuelve reconocible en cada aparición pública de Alcaraz. “Muchos chicos piden exactamente ese look. Me enorgullece y sorprende, porque mi trabajo ahora es conocido en lugares a los que nunca imaginé llegar”, comenta el barbero, cuya clientela ha crecido gracias a la proyección internacional del tenista. Martínez asegura que esta notoriedad ha impactado también en sus finanzas. “El negocio está en su mejor momento. Aunque siempre conté con una clientela fiel, la agenda está llena casi todos los días desde que Carlos empezó a ganar títulos y llegar a finales. Ya estoy considerando mudarme a un local más grande para adaptarme a la nueva demanda”, adelanta.

La relación entre Alcaraz y Martínez no es solo sobre cortes de cabello. Hay un nivel de confianza y complicidad que va más allá de la barbería. Martínez menciona que cuando atiende al jugador, resta un poco más de atención. “Tengo que ofrecerle ciertos privilegios. A menudo trabajamos a puerta cerrada o fuera del horario habitual. Elegimos momentos en los que no hay otros clientes, para que él se sienta cómodo y tenga su espacio. A veces, también voy a su casa si lo necesita”, comparte.

El tenista español Carlos Alcaraz

La discreción y el trato personalizado son esenciales en la rutina que comparten. Cuando coincide con otros clientes, el tenista es cercano: “Carlos es muy natural. Si hay más personas en la barbería, charla y bromea con todos, sin importar su fama”. Las conversaciones suelen incluir temas sobre deportes y la vida cotidiana. Aficionado del Real Madrid, Alcaraz habla de fútbol con entusiasmo y aprovecha las visitas previas a los torneos para compartir sus sensaciones: “Siempre que va a viajar, pasa antes por acá. Hablamos de cómo se siente, si está preparado, y también del partido de la Champions o cualquier otro tema que surja”, cuenta Martínez a CNN Sports.

La conexión entre ambos comenzó con una llamada sorpresiva. Un amigo en común le informó a Martínez que el joven prodigio, ya destacado en el tenis juvenil, quería cortarse el cabello en su barbería. “Ese primer día estaba muy nervioso. Me temblaban las manos porque estaba frente al número uno del mundo juvenil en ese momento. Pero Carlos lo hizo fácil, siempre es cálido en su trato”, recuerda.

Con el tiempo, la relación profesional evolucionó hacia viajes y desplazamientos. En varias ocasiones, Martínez ha acompañado a Alcaraz a ciudades como Valencia o París para atenderlo en esos torneos. “Siempre que ha requerido un corte especial, he estado allí”, expresa con orgullo. La lealtad entre ambos se ha fortalecido en estos dos años. “Desde que le hice el primer corte, nunca ha ido a otro barbero. Eso lo valoro mucho y es motivo de respeto mutuo”, afirma Martínez sobre la continuidad de esta relación.

Los tres récords que Carlos Alcaraz ha conseguido lograr antes que Rafa Nadal.

Un episodio curioso ocurrió en el último Abierto de Estados Unidos, cuando Alcaraz sorprendió con un nuevo estilo. El propio tenista admitió que el corte no lo había hecho Martínez, sino su hermano, debido a un accidente con la máquina de afeitar. “Cuando lo vi en televisión, me reí. Le pregunté y me contó lo sucedido. Son cosas que pasan, pero sé que no volverá a suceder cuando regrese a El Palmar”, asegura el peluquero.

El revuelo causado por el nuevo look de Alcaraz, incluso entre jugadores como Frances Tiafoe, demostró el interés que despierta su imagen fuera del circuito. “Cualquier comentario, bueno o malo, provoca que más personas hablen de nosotros y de nuestro trabajo”, concluye Martínez, quien en cada corte ve una oportunidad para seguir apoyando, en silencio, el camino de una de las grandes figuras del tenis mundial.