En el segundo y último día del Summit 2025, el congreso que se lleva a cabo en la Usina del Arte, Marcelo Fondacaro, Chief Commercial Officer de la empresa Veritran, colaboradora del Manchester City, ofreció una charla sobre ticketing y la digitalización de la experiencia del fanático, es decir, las formas en que los clubes pueden mejorar las vivencias de los hinchas en los estadios y qué implementaciones podrían realizarse específicamente en Argentina.
Con Diego Macías, subdirector de , como moderador, Fondacaro relató cómo Veritran comenzó a colaborar con el gigante Manchester City, club con el que están desarrollando, incluso, proyectos a largo plazo; las mejoras implementadas allí y cómo podrían expandirse las experiencias de los hinchas en los clubes de fútbol argentino.
¿Cómo llega una empresa argentina a desarrollar tecnología en el City?
-Iniciamos en Argentina hace 20 años y, sorprendentemente, el Manchester City se puso en contacto con nosotros para algo que resultó ser completamente diferente. Venimos de la industria financiera, conocemos los procesos transaccionales y, sobre todo, la seguridad. Al comenzar a dialogar con ellos y entender su tecnología, descubrimos que es un club con un avance increíble en el tratamiento de aplicaciones para los fans. Al presentarles lo que hacíamos, ellos dijeron “guau, podemos adelantar diez años todas las ideas que tenemos”. Así nos convertimos en un socio estratégico a largo plazo en todo lo relacionado con el fan ID y la gestión de la experiencia del fan.
¿Qué le agregaron al City?
-Estamos planeando a largo plazo y ya hemos comenzado este año con la identificación de las personas, fanáticos, socios, hinchas. Esto nos permite que el tratamiento de cada persona sea homogéneo en todos los canales a los que accede. Lo que suele suceder en los clubes es que hay una plataforma de ticketing y se requiere acceder a cuatro, cinco o seis aplicaciones diferentes para ingresar al estadio. Incluso los clubes de la Premier y otros de Europa tienen todos los accesos a los hospitalitys, tanto para empresas como para invitados especiales, donde suelen colgar pulseritas o varios identificadores. La idea es evitar todo eso. Estamos trabajando también para eliminar el efectivo en los estadios. Hay países como Inglaterra que son cashless y nosotros queremos que no sean ni cashless ni cardless, es decir, que tampoco se utilicen tarjetas de crédito en los estadios.
¿Qué otros clubes están desarrollando mejoras para los hinchas?
-Realizamos un estudio en Europa y en diversos países de Latinoamérica y notamos un avance significativo en la visión integrada del fan y los servicios hacia ellos, al igual que en el caso del City. Clubs como Liverpool, Real Madrid y Bayern Múnich están atentos y buscando implementar este tipo de mejoras para enriquecer la experiencia. Hoy, el mundo del entretenimiento y el deporte está centrado en la experiencia, cómo se vive no solo durante el partido, sino también antes y después.
¿En el City se puede comprar algo de una manera diferente? ¿Cómo es la experiencia al llegar al estadio?
-Lo primero que buscamos hacer con los clubes es lo mismo que hicimos aquí en el evento (Summit). Es un registro previo, que tiene como objetivo identificar a la persona. Una vez que registras los datos biométricos de alguien, ya no necesitas ningún otro elemento; puedes acceder al estadio utilizando el reconocimiento facial. Si el club no puede o no desea invertir en cambios tecnológicos de hardware, porque a veces es necesario hacerlo, como una máquina que lee la cara, lo que hacemos es adaptar la tecnología a diferentes formatos de acceso. Así, algunos pueden ingresar mediante el reconocimiento facial, otros con un código QR, y otros con tecnología NFC, según lo que tenga el club en ese momento, adaptando la experiencia para evitar cambiar la infraestructura. Este cambio puede ser costoso y requerir procesos más largos. En cuanto a las compras, hay un club en Europa que te facilita la cerveza a través de una máquina automática de su patrocinador, mientras que hay una persona al lado asegurándose de que solo mayores de edad reciban cerveza. En este caso, con el reconocimiento facial, ya sabes si la persona es mayor o no.
-A veces, suena muy costoso para un club argentino. ¿Existen diferentes niveles para mejorar esto sin que suponga una inversión desmedida?
-Sí, definitivamente. Por eso te mencionaba antes que la tecnología debe estar al servicio del negocio y no al revés. No es una imposición tecnológica. Si obligas a los clubes y a sus sistemas de acceso, ahí encuentras un gran problema. Lo que puedes hacer es implementar la tecnología gradualmente para satisfacer las necesidades de cada club. Un club pequeño puede tener una baja inversión y aún así desarrollar muchas de estas soluciones que hoy los clubes grandes, con grandes montos de inversión, pueden alcanzar.
-¿Qué podría solucionarse en Argentina para el socio que, por ejemplo, después de ir a la cancha tiene que realizar una acción o trámite para obtener su ticket?
-Actualmente, hay un problema significativo no solo en Argentina, sino en muchos países, dado que a veces las reservas de tickets son atacadas por bots externos, empresas que atacan a los clubes y los sitios web para reservar entradas, lo que satura el sistema y dificulta obtener un ticket.
-Como sucede en un recital…
-Exactamente, en un recital o cualquier espectáculo con capacidad limitada y alta demanda. A menudo se generan filas virtuales que los clubes no pueden controlar . Y estas filas virtuales afectan la imagen tanto de la compañía de espectáculos como del club. Lo que resolvemos con la biometría es que, sin la biometría, no puedes acceder. Esto elimina la necesidad de largas filas virtuales, porque después de ellas, se requiere usuario y contraseña, que cualquiera puede tener; yo puedo pasarte mis datos y entras por mí. Con biometría, no podrías entrar en mi lugar, tendría que hacerlo yo con mi aplicación, eliminando así ese problema y mejorando la experiencia.
-Los bots también están presentes para conseguir entradas y revenderlas.
-Lo que decimos a los clubes es que con esto pueden tomar control de la reventa. Los clubes generalmente cuentan con un proceso de reventa, pero termina siendo externo porque el gran negocio está en la reventa ajena. Así, si solo el dueño del ticket puede participar en la reventa, el club puede tomar parte. La devolución de entradas para reventa debe ser gestionada por el club. Así, no solo se mejora la imagen del club, sino que también se incrementan los ingresos, ya que el propio club decide cuándo, a quién y en qué circunstancias se realiza la reventa.
-Cuando te sientas a hablar con dirigentes de la Premier, piensas en la idiosincrasia del hincha inglés que va a la cancha. ¿Qué aspectos hay que adaptar en Argentina a las características del hincha argentino?
-Te hablaba de la infraestructura; no hay que invertir millones para modificarla, pero hay un aspecto vital: para que un sistema tenga éxito, debe estar alineado con la cultura. Lo peor que puedes hacer es enfrentarte a la cultura. Si necesitas desarrollar infraestructura pero también deseas desafiar la cultura de un país o población, seguramente ese proyecto fracasará. Por ello, trabajamos con cada club para entender a sus respectivos simpatizantes y la idiosincrasia de cada nación, y así realizar las adaptaciones necesarias. La tecnología debe ajustarse. No es un simple proyecto tecnológico, es un proyecto de comprensión cultural que busca colaborar y navegar sin que se vea afectada. Hoy, la interacción en redes sociales es natural; si me dices hace 20 años que alguien accedería a un estadio con una aplicación móvil, habría sido complicado. Hoy, en los recitales, hay más teléfonos con linternas que cámaras. Todos llevan un celular y, aunque quizás no tengas tu billetera, sí tu móvil. Gran parte de la cultura ya se ha desarrollado, y solo es cuestión de acompañarla.
-¿Algunas medidas que mejorarían la experiencia del usuario en Argentina?
-Primero, si todos los equipos se unieran, deberíamos alcanzar un acuerdo similar al que ocurrió en México o Brasil, para que todos utilicen biometría. Cuando todos usen biometría, podrás decidir quién entra y quién no. Puedes seleccionar quién ocupa la platea, quién no, quién puede acceder a la popular y quién no. Así, se resuelve el problema de las discusiones sobre la habilitación de ciertas personas al estadio. Luego, la gestión de abonos. Si una persona tiene cuatro o cinco abonos, ¿cómo hace para que otros ingresen? También se puede aplicar la misma tecnología a los abonos, ampliando su vigencia. Hoy en Argentina, los métodos de pago predominantes son las billeteras virtuales, que han llegado para quedarse, y no comprendo por qué en un estadio no se podría pagar con el celular.
-Aún nos da un poco de miedo poner la cara en una aplicación. ¿Cómo ves ese tema cultural?
-Te respondo de manera sencilla: le entregaste esa información a las redes sociales, ¿por qué no dársela al club de tus amores?


