El FC Barcelona se lanza nuevamente por Nico Williams. Durante el último verano, tras una Eurocopa en la que España brilló, destacándose el tándem entre el delantero del Athletic y Lamine Yamal, el club azulgrana tuvo en la mira al futbolista vasco. La conexión entre ambos no pasó desapercibida para los directivos del Barcelona, quienes decidieron buscar el fichaje de Williams. Sin embargo, el acuerdo nunca se concretó. Nico optó por quedarse en Bilbao, ya que el club catalán no podía garantizar su inscripción a tiempo, como ocurrió luego con Dani Olmo y Pau Víctor. Esta vez, los culés quieren adelantarse y asegurar la llegada de Nico.
Una vez más, los azulgranas enfrentan un problema recurrente: el fair play financiero. Dani Olmo y Pau Víctor lo sufrieron al inicio de la temporada pasada, cuando el FC Barcelona tuvo serias dudas para inscribirlos en LaLiga. Este año, con el mercado de verano abierto, Laporta vuelve a intentar fichar a Nico Williams, quien ha solicitado garantías para su inscripción en la competición nacional. Además, el Athletic ya se ha presentado ante LaLiga y ha asegurado que supervisará todos los movimientos del Barça.
Con julio en marcha, la directiva azulgrana debe abonar en la primera semana del mes 58 millones de euros correspondientes a la cláusula, más 4 millones por el IPC. Aunque el desembolso económico no es un inconveniente, el cumplimiento del fair play financiero representa un reto para el club. Para equilibrar las cuentas y cumplir con las normativas, Barcelona está enfocado en acelerar la salida de ciertos jugadores, entre ellos Ansu Fati, quien está a un paso de ser cedido al AS Mónaco. El mediapunta cambiará de camiseta para tener más protagonismo y continuidad en el campo.
Otra transacción que podría beneficiar al club catalán es la venta de Pablo Torre. El talentoso mediocampista ha despertado el interés del Mallorca, que busca sumar calidad a su plantilla y darle al joven jugador la oportunidad de acumular minutos en el campo. Estas decisiones son parte de la estrategia de la directiva para cumplir con las exigencias financieras de la liga y gestionar eficientemente la plantilla. Los próximos días serán cruciales para concretar estos movimientos y garantizar que el club avance en sus objetivos tanto deportivos como económicos.
Las finanzas del Barça, a pesar de que Joan Laporta lo afirme, no están en su mejor momento. Desde hace años, el FC Barcelona ha tenido que hacer malabares para resolver sus problemas económicos. Ahora, una vez más, se encuentran en una situación complicada, luchando contra reloj para encontrar una solución al fair play financiero y poder fichar a Nico Williams, el único refuerzo que anhela el club azulgrana.
Los movimientos están planificados y las salidas cerca de concretarse. Este año, parece que intentarán adelantarse a los hechos para evitar lo que vivieron la pasada temporada con Dani Olmo y Pau Víctor. De momento, todo está incierto, aunque es cuestión de tiempo que Nico Williams se vista con la camiseta azulgrana y formalice su inclusión en el FC Barcelona.
