Las selecciones están participando en la Eurocopa femenina 2025, donde España ha destacado en la fase de grupos. Este jueves, Finlandia se enfrentará a Suiza, la anfitriona. Recordando un incidente curioso, durante la clasificación para la Liga de Naciones de la UEFA, sucedió algo sorprendente. En la lista oficial para el duelo decisivo contra Serbia, se incluyó a Stina Ruuskanen, exjugadora de 51 años que se retiró hace casi tres décadas, lo que dejó fuera a la joven defensa Nanne Ruuskanen, de 23 años, que juega en el Djurgården de Suecia. A pesar de compartir apellido, no son parientes.
El error se debió a que el perfil de Stina Ruuskanen no había sido eliminado de la base de datos de la UEFA a pesar de su retiro. Así, el sistema incluyó su nombre cuando se intentaba agregar a Nanne Ruuskanen en la convocatoria. Al descubrir el error, ya no fue posible ajustar la lista oficial de jugadoras, lo que tuvo serias repercusiones para Finlandia.
El partido contra Serbia culminó 1-1, un resultado que, aunque sumó un punto, dejó a Finlandia sin posibilidad de ascenso directo a la Liga A. La selección, que deseaba liderar su grupo, ahora debe disputar playoffs. Más allá del resultado, el caso resalta la importancia de la gestión de información y la actualización de los sistemas en el fútbol femenino, un aspecto crucial para su crecimiento.

Outi Saarinen, entrenadora del equipo finlandés, asumió la responsabilidad tras el partido. Saarinen lamentó lo ocurrido y ofreció disculpas públicas a Nanne Ruuskanen y al equipo. “Nanne estaba decepcionada, pero tomó la noticia muy bien dadas las circunstancias. Lamento mucho el error”, afirmó la entrenadora, refiriéndose al impacto emocional que tuvo en la joven futbolista, que vio frustrada su oportunidad de representar a su país en un partido crucial.
Nanne Ruuskanen optó por restarle gravedad al incidente: “Es increíble que a esta edad todavía me convoquen para la selección nacional. Estoy lista si me llaman. Justo ayer jugué un partido de liga amateur… así que me siento bien. Debemos ganar esta noche, y probablemente por eso me han seleccionado”. Su respuesta ayudó a aliviar la tensión y mostró su profesionalismo ante la situación.
La Federación Finlandesa de Fútbol se vio en la necesidad de actualizar su base de datos y de demandar mayor rigor en los procedimientos de la UEFA. El fútbol femenino, que está en un proceso de crecimiento y profesionalización, enfrenta desafíos relacionados con la visibilidad y la eficiencia administrativa, y situaciones como la de Finlandia son un llamado de atención.