Una nueva lesión de Tomás Albornoz generó un nuevo dilema en Felipe Contepomi a la hora de elegir un conductor para los Pumas en esta ventana de noviembre. Finalmente, para el partido del domingo a las 12.10 ante Gales el entrenador se inclinó por renovar su apuesta por Gerónimo Prisciantelli luego de la gran actuación del jugador surgido del CASI en el último encuentro, su primero como titular en la selección argentina.
Como aquella vez en Twickenham ante los Springboks, Santiago Carreras, el otro candidato a llevar la 10, quien lo venía haciendo muy bien en el Rugby Championship, regresa a su puesto natural de fullback para el encuentro que abre la gira por Europa en el Millennium de Cardiff. La diferencia es que Juan Cruz Mallía, que había actuado de wing, pasa a integrar un lugar en el banco de suplentes.
La esperada inclusión de Simón Benítez como medio-scrum en lugar del lesionado Gonzalo García es otra de las novedades, así como la inclusión de Marcos Kremer en la segunda línea. Pedro Delgado, ausente de los últimos cuatro partidos por compromisos con Harlequins, reemplaza a Joel Sclavi (lesionado) como pilar derecho y Thomas Gallo, el que más jugó en 2024 pero sólo dos partidos este año (ante Inglaterra), regresa desde el banco. Finalmente, Justo Piccardo se mantiene como segundo centro ante la ausencia de Lucio Cinti, ganándole la pulseada a Matías Moroni y Benjamín Elizalde.
“Si bien tenemos la posibilidad de elegir a todos y no descansar a nadie por elección nuestra, también hay que tener en cuenta cuánto vienen jugando, los compromisos con los clubes, cuánto van a jugar de acá en más, tenemos el compromiso de que los 23 que nos representen lo hagan de la mejor manera”, dijo Contepomi en conferencia de prensa al justifica su elección. “Tratamos de prepararlos para que sean exitosos con la camiseta de los Pumas y no sólo que jueguen. Por suerte tenemos un plantel muy competitivo. Entran 23, pero cualquiera de los 32 nos hubiera dejado conformes con la elección.”
Los Pumas llegan a esta ventana con seis bajas de peso (Albornoz, García, Sclavi, Rubiolo, Molina y Cinti), pero con un plantel amplio y recambio de calidad en todas las posiciones. El partido ante Gales, un equipo que llega en crisis, servirá para ratificar el rumbo que tomó el equipo desde que asumió Contepomi y ganar confianza de cara a los dos compromisos más exigentes de la ventana: ante Escocia e Inglaterra, siete y 14 días más tarde respectivamente.
La Argentina necesita obtener buenos resultados para mantenerse entre los seis mejores del ranking y ser uno de los cabezas de serie en el sorteo del próximo Mundial, que se realizará el 3 de diciembre. Una tarea nada sencilla: la última vez que obtuvo dos victorias en la gira europea de fin de año fue en 2014, algo que sólo consiguió cuatro veces en su historia; nunca ganó los tres partidos.
“Lo complejo seguramente vaya más por el tema de los resultados, pero nosotros nos focalizamos en cada partido”, advirtió Contepomi. “Entendemos la historia, no la negamos, está escrita y contra eso no se puede hacer nada. Sí tenemos la oportunidad de hacer algo distinto de acá en adelante. Más allá de la complejidad de las estadísticas, para nosotros pasa por seguir creciendo como equipo. Si eso nos da la posibilidad de obtener dos o tres triunfos, excelente, pero para nosotros se trata de mejorar partido a partido.”
Formación confirmada
Argentina: Santiago Carreras; Bautista Delguy, Justo Piccardo, Santiago Chocobares y Mateo Carreras; Gerónimo Prisciantelli y Simón Benítez Cruz; Juan Martín González, Joaquín Oviedo y Pablo Matera; Marcos Kremer y Guido Petti Pagadizábal; Pedro Delgado, Julián Montoya (c) y Mayco Vivas.
Suplentes: Ignacio Ruiz, Thomas Gallo, Tomás Rapetti, Matías Alemanno, Santiago Grondona, Agustín Moyano, Juan Cruz Mallía y Rodrigo Isgró.






