Huracán no deja de enfrentar adversidades. Lejos ha quedado aquella etapa en la que el equipo mantenía una conexión especial con sus hinchas y estuvo a un paso de poner fin a una extensa sequía de títulos en Primera División. Hoy, la dura realidad golpea a un plantel que no consigue reaccionar. Y, por supuesto, el entrenador no escapa a esta misma sintonía.
“Me siento seguro y convencido de que aún puedo aportar”, expresó Frank Darío Kudelka tras la derrota 2-0 ante Central Córdoba, en un partido que finalizó con el clamor unánime en contra de los jugadores, la Comisión Directiva y el propio deté. Sin embargo, el panorama desolador obliga a no pensar más allá de la recta final del Torneo Clausura, donde Huracán se juega mucho.
No haber aprovechado la oportunidad frente al Ferroviario, dado que una victoria lo hubiera catapultado del puesto 12° al 4° de manera momentánea hasta que Boca y Barracas disputaran su partido pendiente, complica ahora las cosas para los de Parque Patricios. Con 16 puntos en la Zona A, se encuentra a dos de Tigre, que es el octavo, con nueve puntos en juego.
Clasificar a la próxima edición de la máxima competencia continental se había convertido en un objetivo tangible a mediados de 2025. Meses después, se transforma en algo casi inalcanzable. Y hoy, con las tres finales restantes antes de que dejen de computarse los puntos, Huracán pone en la balanza su año.
La recta final de Huracán en el año
¿Qué le queda por delante a los quemeros? Primero deberán visitar a Defensa en Florencio Varela, equipo que se sitúa cuarto en la zona y posee una sólida localía con cinco victorias, un empate y solo una derrota. Posteriormente, recibirán a un Newell’s que atraviesa una crisis tanto deportiva como institucional en el Ducó, para cerrar ante un rival directo en todos los sentidos: Barracas Central.
El Guapo se juega su pase a los playoffs del Clausura, así como la posible clasificación histórica a alguna de las copas internacionales para 2026. Actualmente, se encuentra séptimo en la fase regular con 18 puntos, a tres del puntero Central Córdoba. En la tabla anual, está décimo con 44 puntos, a un punto de entrar en la zona de Sudamericana y a siete de la Libertadores.
Kudelka, pendiendo de un hilo
En medio de este panorama complicado, la continuidad del técnico del Globo está al borde del abismo. Ya en la previa del enfrentamiento con el Ferroviario, se palpaba un ambiente tenso entre los hinchas y el cuerpo técnico. Ante los resultados adversos, el pobre rendimiento del equipo y las declaraciones de Kudelka en diversas conferencias, la relación ha llegado a un punto de no retorno.
La bala de plata que le había otorgado la dirigencia liderada por Abel Poza durante la semana, se transformó, tras la derrota en Av. Amancio Alcorta 3544, en una de bronce. Rápidamente recibió respaldo puertas adentro, que hasta hace poco tardaba en aparecer, y la situación volvió a encuadrarse en la dinámica del “partido a partido”.
La historia del cordobés con Huracán cuenta con varios capítulos (tres, para ser precisos). Pero este último ha sido reciente: asumió en marzo de 2024 y es el segundo ciclo más largo entre los actuales entrenadores del fútbol argentino (el primero es Eduardo Domínguez en Estudiantes).
Y gran parte de este éxito se debe a que Kudelka llevó al Globo a lo más alto: cometió dos torneos y alcanzó una semifinal de Copa Argentina. Un escenario impensado si se considera el estado en el que se encontraba el equipo al momento de su llegada, merodeando la mitad de tabla y mirando de reojo los últimos puestos, recordando la lucha por no descender en 2023.








