Nueva Chicago y Almirante Brown protagonizaron una nueva edición del clásico en Mataderos, un encuentro que culminó en incidentes. La victoria fue para el equipo de Isidro Casanova, que se impuso por 3-1, y la escena caótica en el césped, donde se mezclaron jugadores, policías y dirigentes, marcó el cierre de un partido lleno de tensión.
El desenlace se desencadenó tras el gol de Enzo Cardozo para Almirante en el minuto 50 del segundo tiempo. Este tanto no solo aseguró la victoria visitante, sino que también provocó una serie de reacciones que involucraron a protagonistas de ambos equipos y a las fuerzas de seguridad.
Parece ser que la efusividad del festejo y los gestos de algunos jugadores visitantes hacia la tribuna local encendieron los ánimos y desataron una serie de enfrentamientos.
Como resultado, el lateral Nelson Alegre Rojas fue expulsado del equipo visitante, mientras que la bronca y la frustración se apoderaban de los jugadores locales, incapaces de aceptar la derrota en su propia casa.
La tensión rápidamente se extendió más allá de las líneas del campo de juego. Durante varios minutos, los tumultos involucraron no solo a los jugadores, sino también al cuerpo técnico, dirigentes de ambos clubes y efectivos policiales, quienes debieron intervenir para evitar que la situación escalara. La presencia de la policía fue fundamental para contener los incidentes y restablecer el orden, aunque la imagen del enfrentamiento quedó grabada como el saldo más visible de la jornada.
Finalmente, la calma regreso solo después de varios minutos de tensión, cuando los protagonistas abandonaron el campo.
El partido, correspondiente a la fecha 25 del grupo B de la Primera Nacional, había comenzado con un claro dominio del equipo visitante. Ramón González abrió el marcador, estableciendo la primera diferencia. Más tarde, Ulises Abreliano amplió la ventaja con un magistral tiro libre que dejó sin opciones al arquero local.
El descuento llegó gracias a Daniel Abello, quien marcó de cabeza y devolvió la esperanza a los hinchas de Nueva Chicago. Sin embargo, cuando el equipo de Mataderos buscaba la igualdad, Cardozo sentenció el partido con el tercer gol, aprovechando la salida del arquero y definiendo el 3-1 final.
Este resultado dejó a la Fragata con 24 puntos en la tabla, alejándola de los puestos de descenso a la Primera B, mientras que el Torito se mantiene con 32 unidades en la zona, sin poder acercarse a los puestos del reducido para ascender. La derrota, especialmente dolorosa por tratarse de un clásico y la diferencia en el marcador, encendió los ánimos de los jugadores locales, que no toleraron la celebración de sus adversarios.
El informe arbitral de Juan Pablo Loustau será crucial para determinar si habrá sanciones adicionales tras los incidentes, ya que la situación en el campo se tornó caótica y no se descartan nuevas expulsiones.
En cuanto a la continuidad del certamen, la próxima jornada traerá nuevos desafíos para ambos equipos: Nueva Chicago visitará a Talleres de Remedios de Escalada el sábado, mientras que Almirante Brown recibirá a Central Norte en Isidro Casanova el domingo.