Estaba en el Club Rincón, de Tigre, y los captadores de River me vieron. Hice una sola práctica, jugué de enganche y quedé”. La descripción de Cristian Jaime sobre ese momento crucial en su infancia, adolescencia y vida se alinea con lo que este zurdo de 19 años ha logrado: se ha convertido en el atacante más desequilibrante y revulsivo del equipo de Marcelo Gallardo en apenas 57 minutos y hoy se presenta como una alternativa valiosa para el deté en el once que recibirá a Gimnasia el domingo.
Su intervención en la jugada del gol que le anularon a Borja por offside ante Sarmiento (jugó 29’) y su ingreso contra Independiente Rivadavia (28’) representaron la única ráfaga de frescura de River en los últimos partidos, ya que Jaime posee virtudes escasas en el equipo de MG y que se echan en falta desde la salida de Mastantuono hacia el Real Madrid: el Pity Martínez tenía esas características, pero hace tiempo que no es una opción, y Lencina, otro jugador con capacidad en el uno contra uno, ha mostrado altibajos lógicos en su rendimiento.
Jaime, en cambio, se encuentra en una etapa opuesta a la de la mayoría de sus compañeros, quienes se perciben faltos de confianza y evitan arriesgar en los pases, mientras que el joven siempre apuesta por el mano a mano con el balón en los pies.
Jaime fue compañero de Santino Gallardo en Inferiores y el DT le gusta desde hace tiempo (Prensa River).El impacto de las gambetas de Jaime
La trayectoria del volante ofensivo que firmó con el CARP hasta diciembre de 2028, incluyendo la habitual cláusula de € 100M, se caracteriza por su calidad técnica, personalidad y desparpajo para avanzar con el balón. Estas cualidades fueron reconocidas por los especialistas de River cuando se probó a los nueve años, cautivando también a Gallardo, quien lo ha tenido en la mira desde hace tiempo porque el chico nacido en Tigre pertenece a la misma categoría que Santino, el tercer hijo de cuatro del Muñeco.
Jaime puso el gancho hasta diciembre de 2028 con cláusula de rescisión de 100 millones de euros (Prensa River).En efecto, Jaime sobresalió en la 2006 del CARP junto a Diablito Echeverri y Agustín Ruberto. “Ya mostraba desfachatez, impronta, habilidad y valentía. Era el que mejor gambeteaba, el único capaz de parar y volver a arrancar en un palmo de terreno”, comenta uno de sus formadores que lo dirigió en su proceso inicial en las Inferiores, una etapa en la que “jugaba poco porque era muy pequeño y River lo contuvo”.
Esa contención incluyó apoyo emocional, nutricional y humano para un chico de familia humilde y con diez hermanos, que contaba con la compañía de su abuela Elvira en sus inicios en el club Juventud de Tigre, y que tiene como referentes a Di María y Esequiel Barco. Un talento en pleno crecimiento que podría ser decisivo para lastimar al Lobo en el Monumental.
La presentación de Jaime en el Monumental
River Plate –
