“Soy yo mismo. Yo escribo mi propia historia”. Así define Jannik Sinner el momento crucial de su carrera. Con apenas 23 años, el italiano lidera el ranking ATP como el número uno del mundo con 12.030 puntos, marcando una nueva era en el tenis masculino.
Más allá de su rendimiento en la cancha, Sinner se destaca por una imagen cuidadosamente construida que lo acompaña en cada logro deportivo y cada aparición pública.
Su reciente triunfo se dio en Wimbledon 2025 en julio, enfrentando al español Carlos Alcaraz en una final memorable de 3 horas, donde hasta la realeza estuvo presente para presenciar a los mejores del mundo hacer historia.
Sinner vistió el tradicional atuendo blanco, que consistía en una chaqueta ligera de tenis con cierre, una camiseta técnica y shorts blancos. El estricto código de vestimenta de Wimbledon exige sobriedad, y su porte elevó el uniforme a un ícono visual: cuello limpio, materiales de alta tecnología, sutiles detalles de patrocinadores y un reloj de lujo que solo apareció tras el partido, durante la ceremonia de premiación.
Este conjunto, imbuido con la tradición de Wimbledon, se convirtió en una manifestación de victoria y un símbolo de pertenencia a la élite del tenis. El emotivo momento de besar y alzar la Norman Brookes Challenge Cup se grabó como un ícono de excelencia y compromiso, elementos que definen tanto su actuación en la cancha como su identidad.
Por su parte, Carlos Alcaraz, finalista del torneo, eligió un cárdigan blanco abierto de corte clásico con sutiles detalles y tejido refinado, junto a una remera ajustada y shorts blancos, cumpliendo con el reglamento y evocando el legado histórico del certamen.
Con su consagración en los grandes torneos, Jannik Sinner reafirmó su posición como líder del ranking ATP en junio de 2024. Este reconocimiento llegó con la entrega del ATP World No. 1 trophy, recibido en el Monte Carlo Country Club.
Para la ocasión, Sinner optó por un look que realza su conexión con el mundo deportivo y de la moda: prendas contemporáneas de Gucci y un Rolex en la muñeca. Posando sonriente junto al galardón, se convirtió en el primer italiano en alcanzar el número uno del mundo en la historia del tenis masculino.
Otro momento significativo ocurrió tras ganar el Australian Open 2024. A finales de enero, Sinner volvió a Italia para celebrar su triunfo histórico: el primer hombre italiano en lograr el torneo durante la Era Abierta. Frente al Coliseo romano, sostuvo la Norman Brookes Challenge Cup, fusionando arquitectura, historia y tradición nacional en una sola imagen.
El atuendo para la sesión irradiaba una elegancia moderada: cardigan beige de corte clásico, remera blanca básica y pantalones azul marino con ajuste casual. La paleta de colores neutros y las líneas limpias integraron al tenista en el paisaje de Roma, simbolizando la conexión entre su talento personal y el orgullo colectivo.
La relación entre Jannik Sinner y Gucci trasciende la cancha. Como embajador de la marca italiana, frecuentemente selecciona prendas que reflejan la renovada sastrería de la firma, bajo la dirección creativa de Sabato De Sarno.
En eventos y apariciones importantes, Sinner opta por chombas polo de manga larga en tonos neutros como el verde oliva oscuro, pantalones monocromáticos de corte limpio y accesorios discretos como un reloj clásico de cuero negro. El resultado revela siluetas modernas, tejidos de alta calidad y una presencia sofisticada sin ostentación, todo con una actitud serena y natural.
En momentos más relajados, el italiano adopta una estética casual-veraniega. Su elección incluye camisetas de algodón en tonos beige claro o crema, pantalones blancos slim fit y zapatillas sencillas para días fuera de competencia. El reloj de correa negra se presenta como un detalle constante.
El contraste entre el entorno, desde lujosos hoteles hasta terrazas parisinas, y la elegancia sencilla del atuendo resalta una masculinidad contemporánea donde los cortes y materiales transmiten más que los logos.
Durante el invierno, Sinner prefiere prendas técnicas que mantienen el diseño. Un abrigo blanco acolchado y de corte largo, combinado con un hoodie negro y pantalón deportivo, le permite soportar el frío de los Alpes italianos.
Los accesorios, como gafas de sol negras, subrayan el equilibrio entre protección y presencia visual, demostrando que la practicidad puede alinearse con la estética.
Afuera del circuito competitivo, su estilo sigue ligado al deporte. Opta por sudaderas o buzos NikeCourt negros, con logotipos destacados y corte cómodo, en combinación con joggers y accesorios sobrios.
La actitud relajada, en compañía de colegas y elementos cotidianos como cartas y comida, presenta una versión más cercana del campeón, pero siempre alineada con los códigos de autenticidad de la disciplina.
Durante sus entrenamientos y partidos, el italiano combina rendimiento y estilo: camisetas técnicas NikeCourt negras con gráficos coloridos, shorts en tonos mostaza oscuro y zapatillas de alto rendimiento blancas. Completa su uniforme con gorra, muñequera y medias blancas, apostando al contraste y a la innovación funcional, mientras mantiene su toque personal dentro de la cancha.
Tanto en la cancha como fuera de ella, el italiano se muestra elegante, cuidadoso y preciso, consolidándose como el número 1 en el mundo, al menos por ahora.
