Jannik Sinner se prepara para volver a competir tras su decepcionante salida en el US Open, donde no solo fue eliminado antes de lo esperado, sino que también perdió el primer puesto en el ranking ATP. Su próximo desafío será enfrentarse al croata Marin Cilic. Su llegada a China está marcada por la inclusión de un nuevo fisioterapeuta, el argentino Alejandro Resnicoff, quien aporta un enfoque renovado al entorno del tenista. Sinner aclara que la recuperación del número uno mundial no es su obsesión, aunque tiene el deseo de regresar a los más alto.
Luego de su experiencia en Flushing Meadows, Sinner y su equipo han decidido realizar un profundo análisis de lo que ocurrió y hacer una serie de ajustes para mejorar su juego. “Hemos reflexionado mucho sobre esa final perdida”, comentó el italiano. “Estamos trabajando, cambiando muchas pequeñas cosas. El número de errores ha aumentado, pero esperamos que se estabilice.” Este periodo de transición implica que el jugador asumirá más riesgos en la cancha, aceptando que la búsqueda de nuevas soluciones puede generar un aumento inicial en los errores no forzados. No obstante, Sinner confía en que estos cambios rendirán frutos a mediano plazo, especialmente en una gira asiática donde tiene que defender puntos significativos: el subcampeonato de Pekín (330 puntos perdidos ante Carlos Alcaraz) y el título en Shanghái, donde defiende 1.000 puntos.
Al hablar sobre este proceso de transformación, Sinner enfatiza la importancia de ser paciente y de diferenciar entre el trabajo en los entrenamientos y su aplicación durante los partidos. “Es solo cuestión de tiempo. No sé cuándo podré poner en práctica los cambios en la cancha, porque entrenar y jugar un partido son cosas distintas. Veremos. Estoy muy motivado. Es genial trabajar en cosas nuevas, y luego veremos cuál es el resultado final. Siempre buscamos avanzar. Un paso adelante es mejor que dos hacia atrás. Ya veremos qué lograremos.”
Un aspecto fundamental en esta etapa es la llegada del fisioterapeuta argentino Alejandro Resnicoff. Sinner valora la experiencia y profesionalismo de quien ahora integra su equipo: “Es muy calificado, con 15 años de experiencia en el circuito. También respeta nuestra forma de trabajar como equipo. Está aquí para ayudarme y mejorar algo en mi cuerpo, tenerlo con nosotros es un gran privilegio.” Su referencia al cuidado del cuerpo y al apoyo que recibe destaca la importancia del trabajo interdisciplinario en pos de optimizar rendimiento y recuperación física.
En medio de esta fase de ajustes, Sinner se pronunció sobre las recientes declaraciones de Roger Federer, quien sugirió que los organizadores podrían alterar las superficies de juego para favorecer a los mejores del ranking. Sinner tiene una visión diferente. “Creo que hay tres grandes tipos de cancha: cemento, tierra y césped, y siempre ha sido así”, afirmó. “Las canchas de cemento pueden ser muy similares, pero hay algunas diferencias. Por ejemplo, Indian Wells tiene una pelota que bota mucho. Sin embargo, en general, las condiciones de juego han sido bastante consistentes y no sé si eso cambiará. Como jugador, intento adaptarme lo mejor posible, creo que estoy haciendo un buen trabajo en ese sentido. Pero veremos qué pasa en el futuro con cada torneo.”
La gira asiática representa para Sinner no solamente una oportunidad de competir, sino también un espacio para desarrollar su evolución desde una nueva perspectiva técnica y física. El italiano busca defender sus logros anteriores, pero lo hace abriendo la puerta a un proceso de cambios y adoptando una mentalidad flexible ante los retos que impone el calendario. Enfrentar a Marin Cilic en su primer partido en Pekín será el inicio de una nueva fase para uno de los nombres más firmes del circuito actual, con la mirada puesta en consolidar su tenis y recuperar posiciones en el ranking mundial.