Joao Félix, una de las promesas más valiosas del fútbol mundial, está a punto de finalizar su etapa en las grandes ligas de Europa para comenzar una nueva fase en el Al Nassr de Arabia Saudita, según informan medios españoles.
De acuerdo al diario madrileño As, el traspaso, que se sitúa alrededor de los 50 millones de euros más variables, fue impulsado por la combinación de la presión ejercida por el Chelsea, las exigencias económicas, y la intervención directa de figuras como Cristiano Ronaldo y Jorge Jesus, el entrenador luso del club saudita. El Menino de Ouro, quien debutó en el Benfica y ha pasado por clubes como Atlético de Madrid, Chelsea, FC Barcelona y AC Milan, buscará en la liga saudí un nuevo impulso para su carrera, que en los últimos años ha estado marcada por la irregularidad.
Esta operación representa un alivio financiero para el Chelsea, que apenas un año atrás había pagado 52 millones de euros por su fichaje al Atlético de Madrid. El club londinense, al haber dejado al portugués fuera de la convocatoria para el Mundial de Clubes y no considerarlo en los planes de su actual entrenador, vio en su venta una oportunidad para recuperar parte de la inversión.
El Benfica, ex club de Joao Félix, aspiraba a su regreso, pero las exigencias económicas del Chelsea frustraron la negociación. “Vería con buenos ojos volver” al Benfica, había declarado el delantero semanas atrás, pero la incapacidad del club lisboeta para reunir el dinero solicitado reactivó la opción saudí.
Al Nassr también mostró su interés por el jugador. Jorge Jesus, el técnico del equipo, ya había intentado ficharlo para el Al Hilal durante su mandato y, junto a la presencia de Cristiano Ronaldo, habría sido fundamental para convencerlo. La oferta se ajustó a las expectativas del Chelsea, que ya ha autorizado al jugador para que realice el reconocimiento médico previo a la firma del contrato.
A sus 25 años, Joao Félix enfrenta lo que él mismo califica como una etapa decisiva. Su trayectoria reciente ha estado marcada por la inestabilidad. Comenzó su carrera profesional en el Benfica, donde deslumbró y se convirtió en el fichaje más caro de la historia del Atlético de Madrid, que pagó 127 millones de euros por su traspaso en 2019.
Sin embargo, a pesar de ser una de las cinco operaciones más costosas en la historia del fútbol, no logró consolidarse en el Metropolitano: 34 goles en 131 partidos y una relación tensa con Simeone evidencian que el portugués no se adaptó al sistema ni encontró continuidad.
Su cesión al Chelsea no alteró esta tendencia. En Londres, Félix jugó 40 partidos y anotó 11 goles, una cifra insuficiente para asegurarse un lugar en la plantilla. Una cesión al FC Barcelona le permitió sumar 10 tantos en 44 encuentros, pero nunca fue considerado una apuesta a largo plazo. En el AC Milan, adonde llegó en 2025 mediante un préstamo de seis meses, solo logró anotar tres goles en 21 presentaciones.
A pesar de los altibajos, la suma total de sus traspasos y cesiones supera los 200 millones de euros, un monto que pocos futbolistas en la historia han logrado generar en el mercado.
Su llegada a Arabia Saudita podría abrir un panorama completamente nuevo para el delantero. Al Nassr, que desde 2023 cuenta con Cristiano Ronaldo como su principal estrella, busca ofrecerle la estabilidad y protagonismo que le han faltado en sus experiencias en Europa.
Para Félix, compartir vestuario y liderazgo con el portugués de 40 años, cinco veces Balón de Oro, representa una motivación y un posible punto de inflexión en su carrera. El traspaso tiene como meta clara para el futbolista: volver a disfrutar del fútbol, asumir un rol clave y esperar que ese contexto lo acerque, en condiciones óptimas, al Mundial de 2026.
