La selección de Brasil enfrenta la doble fecha FIFA de septiembre con Carlo Ancelotti en el centro de la atención de la prensa española, debido a las críticas sobre su manejo de la convocatoria de sus figuras para los partidos ante Chile y Bolivia. Según lo informado por Sport, la inclusión de Raphinha, delantero del FC Barcelona, en la lista de convocados para encuentros en los que ya está clasificada para el Mundial 2026, causó malestar y acusaciones de trato desigual hacia otros jugadores brasileños vinculados con el Real Madrid.
El periodista Joaquim Piera destacó en el diario catalán Sport que “Raphinha nunca debió haber sido convocado en esta fecha FIFA de septiembre con Brasil, encarando dos encuentros sin ningún tipo de valor añadido, porque ya está clasificada para el Mundial 2026”. En esa línea, subrayó que la decisión del técnico italiano evidencia “un preocupante trato desigual” entre el internacional blaugrana y la armada canarinha merengue.
En contraste, Vinícius Jr., Rodrygo y Éder Militao se quedaron en Madrid por diversas razones, mientras el futbolista del equipo catalán cruzó el Atlántico y jugó 78 minutos en el Maracaná, en la victoria 3-0 de Brasil sobre Chile, y podría ser titular contra Bolivia en la altura.
De acuerdo con un reporte de Mundo Deportivo, este viaje representó para Raphinha una carga física y logística considerable, con alteraciones de huso horario y condiciones climáticas distintas. Tras participar durante casi 80 minutos en el primer partido, el delantero regresó a la concentración en la Granja Comary en Terésopolis, donde entrenó regularmente durante el fin de semana bajo la supervisión de Ancelotti. El medio catalán indicó que “el jugador blaugrana estuvo siempre en la formación titular que probó Carletto”.
Minutos antes de partir hacia Bolivia, el técnico italiano se presentó ante los medios sin revelar si el extremo sería titular, limitándose a anunciar cambios en el equipo. “La idea que tengo es cambiar un poco, no solo los jugadores, sino nuestra forma de jugar. Debemos considerar el componente de la altitud y estamos evaluando el cansancio de los futbolistas y la estrategia del partido”, explicó. También reconoció que “introduciremos a jugadores con más frescura, porque debemos jugar de manera diferente a lo que hicimos contra Chile, ya que en la altitud no se puede mantener mucha intensidad y presión”.
Informaciones de Marca señalaron que la ausencia de los tres jugadores del Real Madrid se justificó porque “Brasil ya está clasificada” y “para los europeos parecía un esfuerzo extra llevarlos hasta la altura de Bolivia”. Sin embargo, Raphinha fue el único de los habituales que encaró el viaje y, posiblemente, los minutos de ambos partidos, dando lugar a molestias en la directiva del FC Barcelona, que es consciente de su relevancia para un tramo crucial de la temporada. Desde el periódico Sport añadieron: “Un gasto de esfuerzos increíble en un momento clave del curso futbolístico”.
El propio futbolista brasileño utilizó sus redes sociales para expresar su opinión al respecto, escribiendo en portugués: “Siempre es un honor”, acompañado de una fotografía vistiendo la camiseta de la selección.
La planificación de la delegación brasileña incluyó un primer vuelo desde Río de Janeiro hasta Santa Cruz de la Sierra, una ciudad ubicada a 416 metros de altitud. Horas antes del partido, el plantel realizaría un segundo trayecto hacia La Paz para intentar reducir el impacto fisiológico de jugar a más de 4.100 metros de altura.
Según lo expuesto por los principales medios deportivos españoles, la controversia surge a pocos días de que Raphinha deba reincorporarse a la disciplina del Barcelona, que enfrentará primero al Valencia CF en La Liga y, posteriormente, debutará en la Champions League ante el Newcastle United.