Lucas Pratto, actualmente delantero de Sarmiento de Junín, repasó su trayectoria y aportó detalles sobre su abrupta salida de River Plate. También habló del vínculo con Marcelo Gallardo en su segundo ciclo en el club y expresó su admiración por Martín Palermo, a quien dirigió en Olimpia de Paraguay, donde protagonizó discusiones que estuvieron a punto de terminar a los golpes con el Titán.
“En River y en Vélez me podría haber quedado a cumplir contrato cobrando muy buena plata. Podría haber hecho la plancha, pero quería mucho a los clubes y no le servía a ninguna de las partes que yo hiciera eso”, fue la explicación que trazó el Oso sobre sus partidas del Fortín y del Millonario en sus respectivas etapas finales, en diálogo con Clank, el programa de Juan Pablo Varsky.
Sobre el trato recibido en Núñez al volver del préstamo en el Feyenoord de Países Bajos, puntualizó: “Yo me lesiono en Holanda y, cuando vuelvo a River, pretendían que hiciera la recuperación de mi lesión (rotura de ligamentos de tobillo y fractura de peroné) solo, apartado, con un doctor y un preparador físico de la Reserva, siendo jugador del club. No me voy a meter en ninguna dirigencia ni la personalidad de ningún entrenador, pero yo no permitiría como persona, siendo entrenador, que un jugador se entrene solo con un profe. Si fuera por una firma de contrato y esas cosas, no sé cómo se manejaría, pero si tengo en cuenta al jugador, el día de mañana no me gustaría que se entrene solo porque sigue siendo patrimonio del club y hay algunos que tiene valor de reventa”.
Luego agregó: “Cuando me dijeron que tenía que hacer la recuperación solo con un doctor y un profe de Reserva, les dije que no. River tenía una deuda muy grande conmigo. Les dije que me pagaban la deuda o me consideraba jugador libre. Llegamos a un arreglo de rescisión de contrato con pago de deuda y rescindí. Traté la lesión solo, con el Doctor (Jorge) Batista, él me hizo el acompañamiento con un kinesiólogo personal. Llegó Vélez y mi última parte de la recuperación la hice en Vélez”.
Cuando Varsky le preguntó si creía que la decisión de apartarlo del plantel profesional de River había sido del Muñeco Gallardo o de la dirigencia, Pratto respondió: “No sé por qué. Habrá sido en conjunto, a nadie le servía que yo esté en el plantel, ni a los dirigentes ni al cuerpo técnico. Después de lo que yo había conseguido y representaba en esa etapa en el club. Habrán decidido ‘empujémoslo a tomar decisiones’ o a que me quedara como se quedaron ahora algunos chicos apartados, algo que yo no iba a hacer”.
Además, relacionó ese episodio con los cruces que tuvo con Martín Palermo, su entrenador en Olimpia: “Mucha gente, por estar en un lugar, suelta. ‘Bueno, yo estoy acá y voy a estar 10 años’. Yo no soy así. Si veo algo malo, que no hay algo para el bien común de todos y no me sirve, bueno. Tuve discusiones con Palermo, que es una de las personas más importantes de mi carrera futbolística por lo que representaba cuando era chico y lo que me ayudó cuando llegué a Primera”.
Sobre sus charlas con el Loco, reveló: “En Olimpia casi nos hemos ido a las piñas, estuvimos ahí. Él respetando su forma de ser y yo la mía, pero siempre llegando a un acuerdo y entendiendo lo mejor para el club y para cada uno. Los futbolistas somos muy egoístas, pero dentro de ese egoísmo, yo siempre pregono el bien del equipo. En los deportes de equipo es difícil sobresalir solo, pero en el fútbol más. Tenés que ser Messi o Maradona. Y así y todo, a ambos les costó en la Selección”.