Un club hipnótico que atrapa a sus hinchas: se despide otro seguidor fiel

Iker Muniain se despidió de San Lorenzo. Algunos días después de informar a la dirigencia, el vasco regresó a Argentina para transmitir su mensaje de despedida a los hinchas. Lo hizo a través de una conferencia de prensa en el estadio Nuevo Gasómetro, que lo ovacionó por última vez en el cruce de cuartos de final del Torneo Apertura contra Platense. En ese encuentro, describió cómo vivió sus nueve meses en el conjunto de Boedo. “Es un club adictivo, no lo podés soltar más y se va un hincha más”, confesó.

“Tiene muchas cosas buenas como club. Una vez que te metes aquí, lo conoces desde adentro. A muchas personas que vinimos nos ha pasado; lo conocíamos pero no desde dentro, y tenemos el mismo sentimiento”, añadió.

“Se va un hincha, por supuesto. Es hermoso el vínculo que se ha formado entre los vascos y San Lorenzo, entre el Athletic de Bilbao y San Lorenzo. Es lo bonito del fútbol, de la vida, del deporte, poder crear esos vínculos. Ese granito de arena”, concluyó.

El español, de 32 años, no quiso dar certezas sobre su futuro, pero reconoció que “por primera vez en su carrera” está considerando el retiro como futbolista. “He visto que se han dicho muchas cosas, que son ciertas. Desde que debuté con 16 años hice una carrera de 15 años en la máxima categoría y me planteo dejar de jugar; hay muchas posibilidades de que eso suceda”, confesó.

En este sentido, explicó su decisión: “No he tomado esta decisión de manera meditada por mucho tiempo, pero sí la he considerado en los últimos meses. Viene condicionada por una situación familiar de estar lejos de mis hijos. Cuando vine aquí, sabía que iba a ser lo más difícil. Cualquiera que sea padre comprende que estar alejado de sus hijos es de las cosas más complicadas”.

Después de 15 temporadas en el Athletic Club de Bilbao, Muniain se unió a San Lorenzo el 9 de septiembre de 2024, bajo la dirección de Leandro Romagnoli y con Marcelo Moretti como presidente del club. “Afronto este reto con mucha energía. Lo que encontré en el país fue mucho amor y cariño. Estoy muy feliz de pertenecer a este gran club, y espero poder aportar algo a esta institución tan grande. Me encuentro bien, estoy listo para jugar”, aseguró durante la ceremonia de presentación.

El futbolista, nacido en Pamplona, debutó con la camiseta azulgrana cinco días después, en un partido que el Ciclón perdió 1 a 0 frente a Vélez en el Pedro Bidegain, con un gol de Braian Romero. Esa tarde, ingresó a los 12 minutos del segundo tiempo en reemplazo de Santiago Sosa. Su primer partido como titular fue el 28 de septiembre, en la victoria 2 a 1 sobre Banfield en el Bajo Flores, donde anotó ambos goles de su equipo.

Durante sus nueve meses en el país, disputó 25 encuentros y marcó cuatro goles. Su última actuación fue el 25 de mayo, cuando San Lorenzo perdió 1 a 0 ante Platense en el Pedro Bidegain, en una de las semifinales del Torneo Apertura. Posteriormente, viajó a Bilbao para compartir las vacaciones con sus hijos, donde tomó la decisión de finalizar su contrato, que se extendía hasta el 31 de diciembre de este año, aunque contaba con una cláusula que le permitía desvincularse seis meses antes.

Desde su llegada a Buenos Aires, Muniain fue muy bien recibido por los aficionados y mantuvo un excelente vínculo con sus compañeros. Sin embargo, la relación con la dirigencia no era óptima debido a una serie de situaciones que lo fueron desgastando: la licencia del presidente Marcelo Moretti, las deudas de la dirigencia con el plantel y la salida de Miguel Ángel Russo.

Como capitán, el jugador vasco lideró la huelga de un día que realizaron los jugadores el 15 de mayo, en la previa del partido de cuartos de final del Torneo Apertura ante Argentinos Juniors. Según supo Clarín, ese día mantuvo una fuerte discusión con Julio Lopardo, el vicepresidente en ejercicio de la presidencia debido a la licencia de Moretti, por una deuda. Estas circunstancias no contribuyeron a que Muniain continuara en el club.