La rivalidad entre el Real Madrid y el FC Barcelona existen desde hace muchas décadas. Desde que el fútbol llegó a España, ambos equipos han competido por conseguir más títulos y contar con los mejores jugadores. Esta rivalidad no solo influye en el más alto nivel, sino también en las categorías inferiores. Un ejemplo claro es la historia de Juan Miranda, quien después de formarse en las divisiones inferiores del Real Betis, tuvo que optar entre La Masía y La Fábrica. El futbolista eligió el FC Barcelona, donde incluso debutó en un partido oficial con el primer equipo.
Nacido en Olivares, un pequeño pueblo de Sevilla, Miranda inició su formación futbolística en el equipo local antes de unirse a las divisiones inferiores del Real Betis. Su proyección llamó la atención de los técnicos del Betis, quienes lo vieron desarrollarse como una de las promesas más destacadas de su cantera. Esta progresión no pasó desapercibida para los clubes más importantes de España. “No recuerdo quién estaba en la directiva del Betis en ese momento, en la parte de cantera. Lo primero que hicimos fue evaluar: habían venido dos equipos, pero mi familia quería que me quedara“, contó Miranda en el podcast After de Post United. En ese momento, su familia prefería continuar en el proyecto verdiblanco, aunque la realidad cambió tras una reunión insatisfactoria con la directiva.
“Mis padres fueron a hablar con la directiva y no salieron muy conformes de esa reunión“, relató el futbolista. Este episodio fue crucial en su decisión de buscar nuevos horizontes, aunque, según sus propias palabras, siempre mantuvo un buen vínculo y aprecio por el club verdiblanco. “Para mí, el Betis era mi hogar, y fue complicado cambiar a mi familia y mi entorno, pero así fueron las cosas. Hoy estoy contento con esa decisión, porque gracias a eso estoy donde estoy y he vivido todo lo que he vivido”.
Mientras su continuidad en Sevilla estaba pendiente, Miranda recibió ofertas de dos clubes con gran influencia en el fútbol español. “Barça o Madrid. Fui a Barcelona y también a Valdebebas. Hice pruebas para ambos”, reveló. El desenlace no fue inmediato. El futbolista señaló que, aunque ambas canteras le dejaron buenas sensaciones, el contexto deportivo que vivía el Barça y la dinámica interna de La Masía fueron determinantes. “¿Qué vi diferente? Era la época dorada del Barcelona. Como niño, veías a Guardiola y a todos los canteranos en el primer equipo, y eso era muy atractivo”.

El ambiente familiar y la camaradería entre los jugadores en las instalaciones de la cantera azulgrana fueron aspectos que marcaron una gran diferencia para el joven, que ya tenía amigos en el vestuario culé. “Cuando fui a La Masía, me sorprendió la unión que había: cómo convivían, cómo trabajaban en conjunto, el ambiente familiar. Eso me dio mucha confianza. También fue importante que ya conocía a algunos, como Abel o Sergio, que me alentaron a ir. Me decían: ‘Aquí estamos todos juntos, no te va a faltar nada’. Eso me dio tranquilidad”, comentó Miranda.
El salto al Barça le permitió avanzar rápidamente por las distintas categorías del club. En 2017, debutó en Segunda División con el filial y, solo un año después, jugó su primer partido oficial con el primer equipo en la Copa del Rey. Sobre esa experiencia, Miranda destacó la particular filosofía de trabajo implementada en la institución catalana: “Lo que más me impresionó fue la filosofía de trabajo: siempre posesión, rondos, la misma idea en todos los equipos, la misma formación, el mismo estilo. Una filosofía única del Barça que otros han intentado imitar con los años”.
El defensor mencionó que esa coherencia en los valores futbolísticos facilita la integración de los jóvenes de la cantera en el primer equipo. “Por eso, los chicos llegan tan preparados. Gavi o Casadó llegan al primer equipo y parece que encajan desde el primer día porque llevan toda la vida aprendiendo esa forma de jugar”. Su paso por la cantera se dio en un contexto en el que figuraban leyendas como Lionel Messi o Sergio Busquets. Miranda recordó la motivación que sentía al entrenar junto a estas leyendas: “Recuerdo que cuando los juveniles subíamos a entrenar con el Barça B o con el primer equipo, lo hacías con respeto, cuidando de no excederte, pero con una motivación increíble. Esas experiencias te hacen crecer“.
Su período en el Barça se completó con participaciones en tres partidos de Copa del Rey y uno en la Liga de Campeones contra el Tottenham. Posteriormente, Miranda adquirió experiencia en el extranjero tras ser cedido al Schalke 04, antes de volver al Betis como fichaje definitivo. Bajo la dirección de Manuel Pellegrini, el lateral sevillano logró estabilidad y continuidad, consolidándose en la primera plantilla verdiblanca durante cuatro temporadas.
Cuando su contrato con el Betis llegó a su fin, la carrera de Juan Miranda comenzó un nuevo capítulo con su incorporación al Bolonia, en la Serie A italiana. Su trayectoria ilustra la importancia de las decisiones tomadas en las etapas formativas y el valor del entorno, filosofía y cultura de trabajo en los clubes españoles. Los motivos expuestos por Miranda destacan el significativo papel de La Masía como modelo de formación y desarrollo futbolístico, algo que recordó el propio jugador: “Estoy feliz por esa elección, porque me enseñó mucho y me preparó para lo que vino después”.